Cleveland.— La racha de 22 victorias consecutivas, el mejor récord de la Liga Americana (102-60), que consiguieron los Indians quedó en la nada al descubrir la forma de perder con un equipo que nació para ganar.
Los Yankees encienden de nuevo las luces de Nueva York al derrotar 5-2 a Cleveland y con ello convertirse en el décimo equipo que se sobrepone de un 0-2 en serie divisional para alcanzar la final del joven circuito.
En un año que se suponía sería de reconstrucción, los Baby Bombers demuestran que son un equipo construido para pelear por la Serie Mundial.
Yankees triunfó sobre los Indians, que otra vez hacen trizas los corazones de sus fanáticos. Han perdido seis juegos consecutivos ante la oportunidad de ganar una Serie Mundial y una divisional.
Cleveland se convirtió en la primera novena con 100 o más triunfos en la temporada que deja ir una ventaja de 2-0 en la serie divisional, desde los Athletics de Oakland en 2002, también con NY.
Ayer fue la noche de Didi Gregorius. El short stop que llegó para ocupar el enorme lugar que dejó Derek Jeter y no convencía por su falta de bateo, brilló con su madero al conectar dos cuadrangulares que dieron el triunfo a los Bombarderos del Bronx.
El show de Gregorius inició en la parte alta de la primera entrada, cuando con dos outs se voló la barda en solitario por el jardín derecho en un batazo de 375 pies.
En el tercer inning, el infielder, casi con papel calca, bateó otro cuadrangular para extender la ventaja de los neoyorquinos: 3-0.
Didi llegó en 2015 a los Yankees para ocupar el lugar que por 15 años resguardó el Capitán.
En los últimos ocho días, los Yankees enfrentaron su cuarto juego de supervivencia, si se toma en cuenta el encuentro de comodín contra los Twins de Minnesota.
Nueva York se enfrentará ahora a los Astros de Houston en la Serie de Campeonato. El juego 1 está programado para mañana en el Minute Maid Park.
El zurdo CC Sabathia ponchó a nueve enemigos en cuatro innings y un tercio que lanzó contra Cleveland. Recibió cinco hits y dos carreras que pusieron fin a su actuación en Progressive Field.
David Robertson entró a relevar y lo hizo de manera hermética para apuntarse el triunfo. Se mantuvo dos episodios con dos tercios en los que apenas regaló una base por bola y eliminó a cuatro enemigos.
Mientras que Corey Kluber duró sólo tres rollos y dos tercios antes de que el manager Terry Francona acudiera a su bullpen.
El viernes pasado, los Yankees salieron de Cleveland devastados, pero volvieron para arrebatar el triunfo en casa ajena.