De vencer este día a los Pumas, Fernando Ortiz lograría lo que ningún técnico en torneos cortos pudo en el América: Ganar dos veces en fila los tres clásicos contra acérrimos rivales.
Pero más allá de esa estadística, las Águilas han demostrado a lo largo de la historia por qué son el rival a vencer. El dominio que tienen sobre sus clásicos adversarios, además de los títulos, podría ser un argumento más para la palabra que predican como el equipo más grande de México, aunque esta situación siempre generará polémica.
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Sin embargo, los números lo dictan. Contra las Chivas, su principal rival, tienen un dominio de 27 triunfos, 18 empates y 22 derrotas
Caso similar frente a La Máquina de Cruz Azul. Son 27 triunfos por 23 descalabros y 19 empates; sobre los Pumas el dominio es mayor: 28 victorias y sólo 17 derrotas; estas estadísticas son de torneos cortos y sin contar duelos de Copa.
América quiere demostrar por qué es el Rey de los clásicos y esta noche en el Azteca tiene el escenario perfecto.