La piedra de alumbre ha sido utilizada en la cultura asiática y, en los últimos años, ha ganado popularidad como desodorante natural en la occidental. Su uso se incrementó debido a la creencia de que los desodorantes comerciales podrían causar cáncer; sin embargo, hasta la fecha no existe evidencia científica que respalde esta afirmación.
Si es la primera vez que escuchas hablar de la piedra de alumbre, en De Última te contamos sobre sus usos y precauciones, ya que puede que no funcione de la misma manera para todas las personas.
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¿Qué es la piedra de alumbre?
De acuerdo con el médico dermatólogo Simon Scarano, la piedra de alumbre está formada por un mineral natural llamado alumbre de potasio, que se caracteriza por tener propiedades antibacterianas y antisépticas, las cuales ayudan a la barrera protectora de la piel.
La piedra de alumbre se ha utilizado principalmente en la cosmetología como desodorante natural, ya que se ha comprobado científicamente que posee propiedades antimicrobianas capaces de eliminar las bacterias que causan el mal olor, afirma el dermatólogo Scarano.
Además, no está procesada ni contiene químicos como los desodorantes habituales. Sin embargo, el alumbre solo ayuda a controlar el mal olor, ya que no es un antitranspirante comercial.
Este mineral natural de sulfato de aluminio y potasio, también puede funcionar como cicatrizante, ya que proporciona suavidad después de afeitarte o depilarte, cerrando los poros y evitando los vellos encarnados.
Precauciones al usar la pieda de alumbre
- Las personas que padecen de sudoración excesiva, ya que no funciona como antitranspirante y solo ayuda a controlar el mal olor durante un par de horas.
- La piedra de alumbre solo se puede utilizar cuando la piel está húmeda, puesto que si se aplica en seco podría irritar cualquier tipo de piel, en particular las más sensibles y secas.
- Aunque es poco común, algunas personas pueden presentar una reacción alérgica a este mineral. Por ello, se recomienda realizar una prueba en una pequeña zona de la piel para asegurarse de que no cause irritación.
- Uno de los mitos sobre este mineral es su uso para el tratamiento del acné. Aunque cuenta con propiedades antimicrobianas, no se ha encontrado evidencia científica que respalde su eficacia como tratamiento para esta condición, por lo que no se recomienda su uso en personas que padecen acné corporal.
- Si tienes la piel muy sensible, debes tener cuidado al usarla, ya que la forma en que la apliques o la frotes sobre tus axilas podría causar irritación.
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