El maquillaje destaca las facciones del rostro y nos hace sentir muy bellas. En la cosmetiquera llevamos muchos productos, como lo son base, corrector, máscara de pestañas y delineador.
Al momento de arreglarnos debemos cuidar la higiene en nuestros cosméticos, ya que muchas zonas de la cara son delicadas. Una práctica un tanto controversial, que seguramente has intentado, consiste en delinear los ojos por dentro.
Proviene de tendencias como el foxy eye, grunge makeup o bad girl makeup. Sin embargo, hoy en De Última te decimos por qué podría resultar peligrosa.
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Para muchas mujeres, el delineador es un básico del maquillaje no solo porque estiliza el ojo, sino porque puede modificar su forma haciéndolo lucir almendrado, rasgado, más largo o redondo.
¿Y qué decir de los colores? Además del negro, los tonos favoritos de la temporada son azul, café, lavanda, rosa pastel y dorado. Aunque si quieres un extra, los que tienen acabado metálico serán tu mejor opción.
No obstante, un artículo publicado por The Ohio State University Wexner Medical Center explica que esta práctica puede bloquear las glándulas sebáceas, responsables de mantener lubricados los ojos.
Cuando nos delineamos por dentro, la película lagrimal se seca demasiado rápido y genera irritación, así como el crecimiento de bacterias. A largo plazo, es posible que experimentes enrojecimiento, visión borrosa e infecciones ocultares.
¡No te asustes! Mientras seas cuidadosa con la manera en que aplicas tus cosméticos podrás seguir maquillándote como a ti te gusta. Entonces, ¿cómo utilizar del delineador de manera correcta?
Lo primero que tienes que saber es que nunca se pone delineador líquido dentro de los ojos. El mejor producto para este paso es un lápiz con bastante cera, que se deslice fácilmente y no te irrite durante la aplicación.
Kugler Vision recomienda sacarle punta al lápiz antes de cada uso. En el mercado encontrarás sacapuntas especiales para perfilar el trazo.
Ahora, si tu delineador es líquido o viene en otra presentación, apóyate de una brocha limpia para realizar los trazos. Este truco también te dará precisión y uniformidad.
Recuerda cambiar tus cosméticos cada tres meses. Para saber la fecha de expiración, revisa el envase o marca con una etiqueta el día en que los compraste. Finalmente, consulta a un especialista si notas cambios o reacciones al utilizar tus productos de belleza.
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