Una de nuestras cosas favoritas de la temporada vacacional es elegir el maquillaje. Más allá de seleccionar la ropa que llevaremos en la maleta, nos preocupa saber qué cosméticos debemos incluir en el neceser.
Como tal, no existe una regla para maquillarnos en la playa. Pero sí debemos prestar atención a los productos que nos colocamos en el rostro para evitar reacciones contrarias en la piel y aquí te explicamos los motivos.
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Nos queda claro que la playa es el escenario perfecto para lucir atuendos de impacto y destacar las facciones de la cara. El problema es que si nos maquillamos en extenso podríamos obstruir los poros de la piel.
La mayoría de los cosméticos tienen ingredientes comedogénicos, aceites y otros compuestos que obstruyen los poros. En consecuencia, incrementa el riesgo de tener un brote de acné como producto de la acumulación de bacterias y grasa.
A causa del clima cálido y la humedad del mar, los productos líquidos (base o corrector) suelen oxidarse, es decir, cambian de consistencia y color ocasionando reacciones con los aceites naturales de la piel y el pH.
Si tienes rosácea, o alguna otra condición dermatológica, la exposición solar en combinación con el maquillaje podría ocasionar inflamación y enrojecimiento. Un caso similar ocurre con los delineadores de ojos.
Puesto que el agua de albercas y piscinas se limpia con químicos, cuando te metes a nadar los cosméticos se escurren. Nuestra primera reacción es tallarnos los ojos para limpiar el rímel o delineador, aunque corremos el riesgo de llevarnos una bacteria u ocasionar conjuntivitis.
Maquillarnos en la playa no es malo. Aunque debemos ser conscientes que puede ser incómodo traer varios productos e impedir que la piel respire, basta con aplicar bloqueador solar y evitar el uso de polvos o cosméticos waterproof.
Cuando hablamos de maquillaje waterproof nos referimos a esos productos que nos prometen ser resistentes al agua, sudor y humedad. Se trata de cosméticos formulados con hidrofóbicos, es decir, repelentes de cualquier líquido.
Si bien disminuyen el desgaste e incrementan la duración del makeup, lo cierto es que son difíciles de retirar. Algunas personas pueden experimentar alergia a este tipo de productos con síntomas como sensibilidad, irritación, resequedad y aparición de costras.
Ante este problema se presentan los productos hipoalergénicos, cuyos componentes están pensados para producir el mínimo de reacciones por alergia en la piel, no obstruye los poros y algunos de ellos la nutren con aditivos: vitamina E, niacinamida, ácido hialurónico, entre otros.
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