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A menudo me dicen: “¡Yo quiero ser blogger como tú! Porque tu vida es emocionante y te la pasas de viaje, te regalan cosas, te pagan”... Sí, mi vida me hace feliz, pero trabajo a diario para vivir el sueño de hacer lo que más amo y no, no es ser blogger, es ser generadora de contenidos.
También me preguntan si todavía es buena idea crear un blog . Y para mí, es un rotundo no. No es que quiera desalentar a nadie. Solo necesitan manejar los términos correctos. Y es que la palabra “ blogger ” nació por aquellas personas que hace más de 10 años comenzaron a escribir blogs. Esos espacios hablaban de todo, desde moda hasta comida y viajes. Después, o más bien a la par, se comenzaron a desarrollar otras plataformas como YouTube, Twitter e Instagram (obviamente Facebook ya existía). Es decir, todo se desarrolló, se ramificó y fue creciendo y así será, infinitamente.
Ahora bien, el término bloguer mutó a algo que llamamos influencer , y de ahí todo se salió de control, ja ja ja. Para bien y para mal, porque entonces cualquiera con un celular y un tanto de creatividad esperaba recibir las mieles de “ser alguien” en redes sociales. Las marcas se vieron un tanto confundidas, sobre todo a la hora de hablar de presupuestos y cómo escalar sus campañas hacia las distintas plataformas digitales y, más importante aún, no sabían cómo destinar dicho budget a los cientos de miles de “personajes” que viven en la red.
Sufrimos todos: las agencias, las marcas, los bloggers y toda la industria. Hasta el sector editorial, principalmente los impresos, sufrieron pérdidas que algunos no pudieron recuperar (y de esto, desde mi punto de vista, no había necesidad). Sin embargo, hubo una luz al final del camino, y unos cuantos la seguimos, aprendiendo de nuestros errores. Nos dimos cuenta que esto sería un camino infinito, donde el aprendizaje y la creatividad siempre serían la constante.
Así que, chicos y chicas, ser blogger ya no es cool. En principio porque ese término ya mutó. Ser blogger sería limitarse a una sola plataforma y eso de la no diversificación, desde hace mucho, está destinado a fracasar. Si de verdad quieren hacer de esto una profesión, entonces lo que deberían hacer es convertirse en ¡generadores de contenidos! Exactamente así como lo leen. Es tan fácil como su propio nombre lo describe. Todas, absolutamente todas las industrias necesitan hoy por hoy contenido para sus distintas plataformas, desde el muy conocido Facebook hasta Spotify y YouTube. Entonces, mi consejo va en ese camino: generen contenido de acuerdo a sus áreas de especialización y siempre van a tener trabajo. Obviamente, si además es algo que disfrutan, entonces van a vivir de lo que aman.
El mundo digital y el mundo real necesitan generadores de contenido de calidad, necesitan creatividad para enriquecer esa vida alternativa que existe en las redes sociales.
Con cariño,
Gina
