Recuerdo con emoción la primera vez que vi al tío Karl en persona: fue durante una fiesta de Fendi , en Nueva York; la apertura de una nueva tienda de Madison. De hecho, ha sido una de las fiestas más increíbles a las que he asistido. Fue en febrero de 2015, ¡ya tiene varios años! Ahí tuve la oportunidad de conocer y saludar a varios personajes que admiro desde hace mucho, como Sarah Jessica Parker, Sofía Coppola, Suzy Menkes y Rihanna . Por supuesto, la cereza del pastel fue la asistencia de Karl Lagerfeld con Silvia Venturini Fendi , ambos directores creativos de la marca.
Aunque no lo crean soy muy penosa y me cuesta mucho trabajo acercarme con alguien que admiro para pedirle una foto. Soy muy 'low profile' con esos temas. Hoy me arrepiento un poco de no haberme tomado una foto con él. Pero, sin duda, atesoro más ese momento por no haber un registro físico de aquel encuentro. Karl tenía una personalidad vibrante, se hacía notar cuando entraba a un lugar. Yo siempre bromeaba diciendo que si Karl te volteaba a ver, con su mirada podía traspasar tu corazón. Así de potente era su presencia .
Es muy poderoso cuando uno se encuentra en el mismo sitio con alguien que te ha inspirado para tomar cierto curso en tu vida. Para mí, Lagerfeld era ese ícono que, en su momento, me motivó a hacer moda y a estudiar ilustración. He visto un par de documentales en donde se puede palpar más de cerca su esencia. Les recomiendo (si no lo han visto) la serie de Netflix que se llama 7 Days Out , en donde se habla de la semana anterior a un desfile de Alta Costura de la casa francesa Chanel . Otro que me fascinó fue el de Lagerfeld Confidential , en donde se explora al personaje y a la casa de moda que dirigía.
La última vez que vi a Karl fue hace un año, aproximadamente, en el cierre de un desfile de Fendi. Recuerdo que me traumaticé porque lo vi cabizbajo y caminando con mucha dificultad. Cuando terminó el desfile , tuvo que dar unos pocos pasos para salir a agradecer a los asistentes, ya usaba bastón y se le veía encorvado y cansado. Aún así siguió trabajando como el 'workaholic' que era. Siento que era una de las personalidades más trabajadoras, multifacéticas y apasionadas de la industria. Jamás logré descifrar la ecuación de cómo lograba tanto en las mismas 24 horas que los demás mortales tenemos.
Como todo personaje de su talla siempre fue cuestionado su peculiar estilo y su carácter . Hasta después de su muerte se sigue hablando de su lado obscuro en dónde se vislumbraba como alguien duro (inclusive cruel), con posturas radicales en cuanto al clasismo y al aspecto físico de las personas. Pero más allá de eso, toda mi admiración hacia un hombre que inspiró a muchas generaciones y que transformó la moda y la manera de moverse la industria. Karl nos demostró que para ser exitoso hay que trabajar y entregar el corazón en cada momento y proyecto, sin importar qué tan pequeño pudiera parecer. Karl Lagerfeld , la leyenda, deja un vacío profundo en la industria y un legado que permanecerá por siempre.
Gina