En la década de los cincuenta y sesenta, la guayabera ganó popularidad en América Latina y Estados Unidos. Era considerada una prenda que combinaba el estilo relajado con la elegancia clásica. Desde el escritor Gabriel García Márquez hasta el expresidente Bill Clinton, la adoptaron como parte de su vestuario.
La guayabera, además, ha sido inmortalizada en canciones, películas y en la literatura, simbolizando no solo el estilo caribeño, sino también la identidad y el orgullo cultural. En países como Colombia, Cuba y México, esta prenda es considerada la “camisa nacional”.
Nació en Cuba a finales del XVIII, confeccionada con varios bolsillos para poder portar fruta en su interior. La guayabera, también conocida como “camisa de Yucatán”, se diferencia de la camisa tradicional porque es holgada y con un corte más recto.
Aunque los modelos más populares tienen manga corta, la manga larga se suele usar para eventos formales y en propuestas más modernas. Generalmente es confeccionada en lino o algodón, para combatir el calor tropical. De ahí, que su uso en verano sea muy común.
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La camisa renuente al olvido
Con el pasar de los años, la guayabera ha ido evolucionando y se ha adaptado por algunas firmas de moda como Carolina Herrera o Brunello Cucinelli, las cuales la han subido con éxito a la pasarela.
Muchos diseñadores de moda le han incorporado nuevos materiales, colores y patrones. Tanto marcas de alta costura como diseñadores independientes han presentado versiones modernizadas de la camisa en pasarelas internacionales, llevando la guayabera a un público más amplio y diverso.
Sin embargo, en la actualidad, aún muchas guayaberas se hacen a mano por artesanos locales, quienes utilizan técnicas ancestrales que se han transmitido de generación en generación. Este enfoque no solo apoya a las comunidades, sino que también garantiza una menor huella de carbono en comparación con la producción masiva de ropa.
En esta temporada, la guayabera se combina con pantalones rectos en tonos claros, como el blanco, el beige o el azul bebé. Algunos le imprimen un toque más actual llevándola con un par de jeans. Para el calzado, se puede optar por unos tenis de estilo clásico, mocasines, sandalias de tiras y, por qué no, un par de Crocs.
Con información de EFE - Reportajes.
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