El cuidado de la piel va más allá del uso de productos skincare. Tenemos que estar vigilantes para detectar cambios en manchas, lunares y pecas, para acudir a un especialista en dermatología si alguna variación nos preocupa: color, tamaño, forma o grosor.
¿Sabes de qué se trata el autoexamen de piel? Se trata de la exploración visual de la piel, en todo el cuerpo, que cada uno de nosotros puede hacer en casa. El objetivo es la detección oportuna del cáncer de piel: mientras más temprano sea detectado, más eficaz será el tratamiento. Se puede realizar una vez al mes, a menos que el especialista indique otra periodicidad.
“Los autoexámenes regulares de la piel son especialmente importantes para las personas que presentan un mayor riesgo de cáncer de piel, como las personas con inmunidad reducida, las que han tenido cáncer de piel antes, aquellas que tienen muchos lunares u otras manchas en la piel y las personas con un marcado antecedente familiar de cáncer de piel”, detallan en el sitio de la American Cancer Society (Sociedad Estadounidense contra el Cáncer), en el artículo Cómo hacerse un autoexamen de piel.
Para que sea exitoso, es importante que te familiarices con las formas de tus manchas y lunares, para que puedas identificar cualquier anomalía. Esto lo vas a lograr con la práctica de observación al realizar tus autoexámenes.
Esta ONG estadounidense aconseja contar con un espejo de cuerpo completo y otro de mano para realizar la exploración. Así como hacerla en una habitación con buena iluminación. También podría ser necesario el apoyo de alguien de confianza (pareja, madre, etc.) para que ayude a ver áreas difíciles como espalda y cuero cabelludo.
-Puedes comenzar con la exploración de tu rostro, orejas y cuello. Puedes usar el espejo de mano para revisar la parte trasera del cuello y las orejas.
-Continúa con el pecho y el abdomen. La American Cancer Society recomienda a las mujeres no olvidar la piel debajo de los senos.
-Sigue con las axilas, los brazos y las manos (palma y dorso); al llegar a ellas, detente para revisar tus dedos y uñas.
-Recomiendan sentarse para revisar las piernas. Ver la parte delantera de los muslos, las espinillas, el empeine, dedos de los pies (entre ellos también) y uñas.
-Con el espejito de mano (trata de que tenga un tamaño cómodo, que no sea muy pequeño), observa la planta de los pies, las pantorrillas y la parte posterior de los muslos.
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-Usa el espejo de mano para revisar la zona baja de la espalda, de los glúteos y el área genital.
-“También puede ser más fácil mirarse la espalda en un espejo de pared usando un espejo de mano”, dicen en el sitio de la ONG. Aunque la persona de confianza podría ayudar a hacer una segunda revisión.
-Finalmente, recomiendan usar un peine o secadora de cabello para hacer la revisión del cuero cabelludo.
“Examine cualquier lunar, manchas o marcas de nacimiento desde la cabeza a los pies. Si se examina la piel periódicamente, sabrá lo que es normal en su caso”, explican.
Aunque los cuidados de protección solar, incluyendo el uso diario del fotoprotector, son sumamente importantes, debes tener en cuenta que el cáncer de piel puede manifestarse en zonas protegidas del sol o que no son expuestas. Por eso, hay que hacer esta revisión completa, de la cabeza a los pies.
La American Cancer Society guía sobre los hallazgos que pueden ser considerados como “sospechosos” y que debes comunicar a tu especialista:
Sobre el cambio de tamaño, se debe consultar al especialista especialmente cuando tiene 6 milímetros o más.
No olvides que la aparición de manchas en las uñas también debe ser revisada por un especialista.
Un espejo puede ser tu aliado para cuidar la belleza y la salud de tu piel. Úsalo una vez al mes para observarla con atención.
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