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El calzado para estar cómoda en casa, por excelencia durante esta temporada de frío, son las pantuflas y, aunque no salgas con ellas, por el uso constante, tienden a ensuciarse. Para que no sean un foco de bacterias, se debe tener un cuidado especial a la hora de lavarlas .
Muchas veces el momento de lavarlas se aplaza hasta que la suciedad se vuelve notable. Esto por el temor de que pierdan la forma o la suavidad de su textura. Por eso, compartimos algunos tips para que las mantengas siempre limpias y en buen estado.
Foto: Unsplash
¿Cómo lavar tus pantuflas?
A la hora de comprar tus pantuflas debes fijarte en las instrucciones de lavado que vienen en el empaque o en la etiqueta interna, ahí dirá específicamente si tu calzado es apto para meterlo a la lavadora o no.
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Lavar a mano
Si tus pantuflas tienen mal olor, puedes esparcir un poco de bicarbonato de sodio dentro de tu calzado unas horas antes de lavarlas para que se absorba el olor.
En un recipiente o cubeta con agua, disuelve un poco del jabón para ropa que utilizas normalmente con una cucharada de bicarbonato y sumerge las pantuflas por unos 10 minutos, asegúrate de que absorban todo el jabón.
Puedes tallar suavemente con tus manos para que salga la suciedad o, si tienen alguna mancha específica, puedes tallar esa parte con cepillo de dientes.
Para enjuagar, puedes pasarlas bajo el chorro del agua para retirar el exceso de jabón y después volverlas a poner a remojar por unos minutos solo en agua para que se salga por completo el jabón que se quedó en las fibras de los tejidos.
Para retirar el exceso de agua, debes apretarlas en distintos minutos, también te puedes apoyar con una toalla para que absorba el agua y se sequen más rápido. No las exprimas.
Déjalas secar en un lugar fresco en donde les dé el sol directamente.
En lavadora
El consejo más importante para no deformarlas y, sobre todo, no encogerlas, es usar siempre agua tibia, en un ciclo de lavado suave.
Te recomendamos meter las pantuflas en una bolsa de malla especial para lavado, si es que quieres meterlas junto con tu carga de ropa regular.
Agrega junto con el jabón un chorrito de vinagre blanco para desinfectar todo a la perfección.
En la opción de secado, ten cuidado y elige el grado más bajo de calor, aunque es preferible que se sequen al aire libre en un lugar donde no les dé el sol.
Foto: Unsplash
Pantuflas de gamuza o felpa
Si tu calzado es de un material extra delicado y no te da confianza lavarlo de manera convencional, puedes intentar un lavado en seco mezclando en agua caliente una cucharada de bicarbonato, una cucharada de vinagre blanco y jabón líquido.
Después de revolver bien, sumerge una esquina de un paño o toalla limpia y exprime para retirar el exceso de agua. Posteriormente, talla las pantuflas con la toalla, con movimientos suaves.
Cuando hayas terminado, remoja el paño solo con agua, exprímelo y talla nuevamente el calzado, ahora solo con agua para retirar la mezcla del jabón.
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