Cumplir 25 años significa muchas cosas, que ya eres un adulto capaz de cuidarse a sí mismo, que eres libre de construir tus propios hábitos y que es hora de hacerte responsable de absolutamente todo en tu vida.
Puede que la palabra “todo” sea muy amplia, pero a esta edad, en ese conjunto de cosas de las que ya eres responsable entra el cuidado de la piel y cómo la vas a cuidar de aquí en adelante.
No queremos asustarte, pero desde los 25 años debes prestar más atención a tu rostro, pues la piel ya no es la misma que cuando tenías 20 y si quieres tener un cutis de revista a los 40 años debes seguir los tips aquí en De Última te daremos.
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Necesitamos hablar con la verdad por más cruda que esta sea, según el sitio web de Mayoclinic, a los 25 años, la piel comienza a bajar los niveles de proteínas naturales. Esto ocasiona que aparezcan los primeros signos de la edad en zonas como el contorno de ojos, boca y cuello.
Otro dato importante es la pérdida de colágeno y elasticidad en la piel. Puede sonar a regaño, pero todas las noches que pasaste en vela cantando y disfrutando de la vida nocturna te cobran factura. Según el portal web de Neutrogena, las cantidades de colágeno que produce tu piel bajan considerablemente y es necesario invertir en una rutina ideal para cuidar tu piel al 100%.
Ahora con esta información a la mano, te daremos los mejores tips para que logres llegar con una piel de porcelana a los 40 años , recuerda que debes ser constante, el futuro se trabaja en el presente y es hora de que le metas mucho esfuerzo a la rutina de skin care.
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Antes de los 25 podías olvidar este paso, pero ahora, ¡jamás! Esto se debe a que la piel del contorno de los ojos es más delgada, contiene menos colágeno y posee menor cantidad de glándulas sebáceas que el resto de la cara, por lo que los signos del envejecimiento tienden a reflejarse antes.
Evítalo a toda costa y aplica diariamente una crema para el contorno de ojos con movimientos suaves (usando el dedo anular que es el de menor fuerza) para no dañar la piel.
Foto: Pexels
Nos referimos a que duermas tus 8 horas y descanses sin interrupciones. Lo sabemos, parece casi imposible por el trabajo, las salidas con tus amigos y las obligaciones de adulto pero, ¡vale la pena intentarlo para presumir un rostro de 10!
Las manos son un vehículo de suciedad al estar expuestas a todas las fuentes de contaminación y, su acumulación en la cara, bloquea los poros, inflama las células, produce estrés oxidativo y acaba con la hidratación. ¿Las consecuencias? Un envejecimiento facial temprano.
Es mejor que desarrolles el hábito de no tocar tu cara con las manos sucias ni tallar los ojos con las manos, aún cuando estén limpias.
No queremos sonar como tu abuelita, pero… eres lo que comes. Lamentamos decírtelo, pero si tu cuerpo se encuentra deshidratado, falto de nutrientes o con exceso de grasa, tu piel será la primera en notarlo.
Ya tuviste una larga jornada para experimentar con productos que eran bonitos solo por el empaque. Ahora, es momento de invertir en cosméticos y herramientas de calidad, aunque sean pocos al principio tu piel lo agradecerá con el tiempo.
Invierte en una buena rutina de skin care y en productos de uso diario, recuerda que la calidad no va peleada con el precio.
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