Para la medicina, el bicarbonato de sodio es uno de los antiácidos más populares que se usan para controlar la acidez y la indigestión , pero en el mundo de la belleza se ha convertido en una de las sustancias más versátiles y económicas que existen para tener un cutis de porcelana.
Por su composición química, este maravilloso polvo puede ser un eficaz exfoliante y es capaz de ayudar a disminuir las manchas y las arrugas finas . ¿Interesante, no?
Antes de correr a la alacena y ponerte toda la bolsita de bicarbonato de sodio la cara, debes saber que siempre existe el riesgo de que tu piel se irrite, por lo que te sugerimos que, para evitar inconvenientes, antes de aplicarte alguna de las mascarillas caseras que te sugerimos, primero prueba en una pequeña zona de tu rostro o cuello. Si no tienes ninguna reacción, adelante.
El primer uso que puedes darle al bicarbonato de sodio como tratamiento de belleza es como un eficaz exfoliante .
Solo debes mezclar una parte de bicarbonato de sodio por tres de agua, para formar una suave mascarilla que debes aplicar sobre el rostro limpio y seco.
Frota muy suavemente con movimientos circulares y ascendentes durante unos minutos para eliminar las células muertas. Enjuaga con agua fría. Notarás inmediatamente una piel lisa. Puedes repetir este proceso una vez al mes, así le darás tiempo a tu epidermis de renovarse.
El bicarbonato de sodio también puede ocuparse como un rejuvenecedor facial pues ayuda a disminuir finas líneas de expresión .
Para este tratamiento necesitarás una taza de té de manzanilla tibio, que tiene propiedades calmantes, lo que evitará que la piel se irrite. Agrega una cucharada de bicarbonato de sodio y mezcla.
Con ayuda de un pad de algodón, aplica sobre todo en frente y alrededor de la boca. Evita el contacto en la delicada piel alrededor de los ojos.
Deja que el líquido actúe de 10 a 15 minutos y enjuaga tu cara. Si sientes hormigueo o irriración, lava inmediatamente.
Puedes repetir el proceso cada 15 días.
Existe un uso más del bicarbonato de sodio en la belleza: como auxiliar para disminuir las manchas en el rostro y las axilas.
Para este tratamiento necesitarás medio vaso de agua mineral, unas gotas de limón y dos cucharadas de bicarbonato de sodio .
Mezcla los ingredientes y aplica la emulsión directamente sobre las manchas del rostro o en las axilas, según sea el caso.
Déjalo actuar de 8 a 10 minutos sobre el rostro, evitando la piel alrededor de los ojos; o de 10 a 15 sobre las axilas. Enjuaga abundantemente. Posteriormente, refresca la zona con agua termal.
Es muy, muy importante que mientras aplicas la emulsión o estés esperando que actué no estés expuesta al sol, porque podrías irritar tu piel o mancharla aún más.
No combines esta emulsión con otro tratamiento cosmético despigmentante, sobre todo si contiene hidroquinona, ácido salicílico, vitamina C o exfoliantes químicos.
Repite el proceso cada dos semanas. Suspende inmediatamente si te causa irritación.