Del 15 al 18 de octubre, los amantes de la moda tuvieron una cita en el Autocinema Coyote para ser testigos de las nuevas tendencias que, seguramente, saltarán de la pasarela a los looks más audaces para conquistar las calles.
En su última jornada de actividades, el Mercedes-Benz Fashion Week México le abrió las puertas a una cartelera que apostó por la nostalgia y la innovación. Desde las pasarelas, figuras del diseño mexicano como Alfredo Martínez y Mancandy nos hicieron ver una vez más que siempre se puede regresar al origen para dar una bocanada de aire fresco.
Te contamos todos los detalles del cierre de Fashion Week México, desde el debut de Regina Guiot hasta los nuevos uniformes de Aeroméxico por Yakampot.
Desde la Universidad Anáhuac, la diseñadora egresada Regina Cervantes mostró una colección con estilismo de Tino Portillo, donde los colores tierra, los estampados de inspiración africana y la soltura de ciertos vestidos fueron vitales entre sus 21 piezas, inspiradas en el trabajo de protección de la zoóloga estadounidense Dian Fossey.
Texturas como lino, mezclilla y piel son parte fundamental de lo que Regina presentó para la próxima temporada. Además, la creativa apostó por un calzado bastante diversificado, entre kitten heels de colores tierra y botas estilo explorador en gamuza. Passionarte tuvo mucho que ver acá, pues los sombreros y tocados son de la firma mexicana que aderezó cada look con su creatividad.
Este desfile marcó un momento importante para la diseñadora emergente, quien logró capturar la atención de los asistentes con tocados elaborados en mezclilla, looks bastante juveniles y vestidos que son ideales para hacerle frente a la remontada del calor en primavera y verano.
Para celebrar los 90 años de la aerolínea mexicana, Concepción Orvañanos (fundadora y directora creativa de la firma) le dio un cambio de look a toda la flotilla de Aeroméxico, inspirado en el Cuauhpilli (guerrero águila), figura que en la cosmogonía prehispánica representó a guerreros que alcanzaban un alto nivel de conciencia y cuidado de su comunidad.
Con 15 looks que representan a toda la tripulación de un vuelo comercial, Orvañanos, con colaboración de artesanas de Chiapas, demostró que los textiles chiapanecos se pueden colocar en los uniformes institucionales de una de las empresas más grandes del país, sin dejar de lado la funcionalidad y el estilo sobrio que han caracterizado a las creaciones de Yakampot y a Aeroméxico.
En la tarde, la firma Boyfriend's Shirt, liderada por Laura Carrillo, demostró que los sentimientos masculinos pueden inspirar una colección ganadora en el street style, para la cual empleó textiles rescatados y siluetas reconstruidas.
El trabajo presentado por Carrillo es una colaboración entre el equipo de fútbol regiomontano “Rayados”, donde los jerseys y las prendas oversize adquieren un papel importante a la hora de crear un buen look. Además, la firma mexicana dejó ver que el 'bloke core' (incorporación de la camiseta deportiva en el outfit) es una de las tendencias más fuertes de la temporada.
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Con la caída de la noche, llegó la hora de ver el SS25 que Andrés Jiménez (Mancandy) tenía para mostrar en Fashion Week México y, realmente, nos llevó a ese sentimiento de lo que eran las salidas nocturnas a principios del siglo. Los pantalones, de mezclilla o de tela de punto, fueron su punto fuerte, una pieza infaltable en su desfile.
Mancandy reforzó el regreso triunfal de una sandalia alta de tiras delicadas, la calceta blanca, las capas y prendas que tienen connotaciones sexuales sin llegar a ser vulgar; ya que el creativo mexicano nos ofreció esa elegancia que existe en el tomar las fiestas como un verdadero rockstar.
La colección cuenta con prendas llenas de vida y color que difícilmente pasan desapercibidas. Un acierto enorme de Jiménez fue mezclar esta inspiración totalmente urbana con la música de Bad Gyal; durante el desfile, "Give Me" fue el clímax musical que terminó de ensamblar la entrega de Mancandy.
Luego de días de espera, el diseñador tapatío Alfredo Martínez presentó una colección inspirada en Carmen Mondragón, con la que se superó a él mismo, incluyendo propuestas de prendas masculinas a su universo conocido por su estética sumamente elegante.
En la colección "La mirada infinita", el tapatío se hizo el mejor amigo del maximalismo y fue aliado de los vestidos vaporosos. Además, presentó el "COCKTA.I.L DRESS”, un vestido inspirado en la bebida “Johnnie Walker Black Ruby Sweet and Sour”, mismo que fue creado con ayuda de inteligencia artificial y la interpretación del diseñador mexicano.
Sus looks se complementaron con accesorios cargados de perlas plateadas y carteras XL, con predominio de la emulación de piel de cocodrilo. En este desfile, Alfredo también propuso el pixie como el corte de pelo más fantástico de la próxima temporada.
Mientras sus piezas etéreas y sensuales se adueñaban de la pasarela, "Choose Us", de Lulu & Alice, y "Promiseland, Yonder", de Promiseland, hicieron el ensamble perfecto para una de las mejores entregas de Alfredo Martínez.
Al cierre de la pasarela, texturas como piel y vestidos que pasaban del plateado al negro (sin olvidar el rojo) tomaron por sorpresa a los asistentes, quienes se quedaron boquiabiertos, mientras sonaba un cover de "El muchacho de los ojos tristes", de Mazmorra Brillante.
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