Con la llegada de la época estival, algunas prendas se quedan en casa mientras que otras salen a las calles. Tal es el caso de las faldas , que dada su frescura y comodidad se convierten en protagonistas indiscutibles de la estación. De H&M a Versace, esta pieza se presenta en una gran variedad de cortes, materiales, colores y estampados, pero bajo un objetivo en común: servir de comodín tanto en situaciones casuales como en ocasiones formales.
Por fortuna, existen diferentes estilos (plisada, de mezclilla, a cuadros, con volumen, entre otras) que se adaptan a todos los tipos de cuerpo y personalidades. Porque, como han señalado diseñadores de la talla de Mary Quant (a quien se le atribuye la creación de la mini), la falda es, más que una prenda, una actitud. Elige el modelo perfecto para ti con esta selección que te traemos y aprende a combinarla como una experta. Es momento de ponerte bien la falda y dar por inaugurada, de manera oficial, la temporada de verano .
De batalla larga
Por su comodidad y practicidad, las faldas de mezclilla son un modelo básico en cualquier guardarropa. Una pieza arriba del medio muslo puede combinarse desde con una camiseta blanca hasta con una blusa estampada para salir a caminar durante el fin de semana o llevar de viaje a la playa. La cantante Rihanna opta por este último estilo para lucir en sus días de descanso, pero acompaña esta prenda con botines acharolados. Para darle un acento más formal al atuendo, basta sumar un blazer a cuadros o en color sólido.
La firma española Loewe propone para esta temporada looks completos de mezclilla, compuestos por faldas largas con yuxtaposiciones de seda, y ponchos confeccionados con este resistente material. Jennifer Lopez también prefiere el largo al tobillo, así como los modelos elaborados bajo la técnica de patchwork (con diferentes pedazos de tela). En un mood más rockero, esta prenda puede mezclarse con botas de estilo militar, un pullover en color neutro y una chamarra de cuero.
Foto: Zara
Sube el volumen
Se tiene la creencia de que solo las mujeres delgadas pueden ‘darse el lujo’ de llevar ropa voluminosa. Nada más equivocado. Una falda de líneas amplias es perfecta para todo tipo de cuerpo, solo es cuestión de mantener un equilibrio con las demás piezas. Por ejemplo, un diseño largo abullonado de color negro combina bien con una playera blanca y unas sandalias de tiras o flats. Solo asegúrate de que su largo no sobrepase el tobillo, que no te apriete de la cintura y que la camiseta vaya por dentro de la falda para verte estilizada.
Este tipo de modelo beneficia mucho a la zona de la cadera ya que, por una parte, ayuda a disimular los odiados ‘rollitos’ y, por otro, aporta volumen a las mujeres que tienen una silueta rectangular. Ya sea midi o maxi, escalonadas o con volantes, hay diferentes estilos según la ocasión. Además del clásico negro, otros colores estrella de la temporada son beige, rojo, azul claro e, incluso, morado. No pueden faltar tampoco los diseños con estampados de lunares, rayas horizontales o flores.
Foto: Shein
De altos vuelos
Las faldas plisadas se han convertido en un comodín del guardarropa femenino no solo por su versatilidad, sino también por su sofisticación. Combinadas con una camiseta básica o un suéter tejido de manga corta, así como con unos sneakers, se consigue un look presentable para salir de viaje o fin de semana. Si agregas un cinturón con logo de diseñador, le darás un acento de lujo al atuendo y lograrás transformarlo para usar en un día de oficina casual.
El diseñador Brandon Maxwell apuesta esta temporada por las faldas confeccionadas con materiales brillosos, y las mezcla con elegantes blusas de seda rosa y sandalias altas para asistir a celebraciones de día. Fendi va un paso adelante al combinar esta pieza con crop tops de tejido de punto y calzado decorado con piel falsa. En marcas como Zara, H&M y Mango hay gran variedad de modelos en tonos de verde, rosa, azul, beige, rojo y morado. Una clave para lucirla adecuadamente es que su largo se ubique a media pierna, es decir, entre la rodilla y el tobillo.
Foto: Mango
Estilo al cuadrado
Uno de los estampados por excelencia son los cuadros, debido a que son fáciles de combinar, pueden llevarse a lo largo del año y le dan un aspecto diferente a cualquier prenda tradicional. Las faldas no son la excepción. Pequeños, grandes, escoceses, de tipo vichy o diagonales se encuentran entre las opciones para reinventar esta pieza. Para un look casual y juvenil, basta elegir una falda de cuadros grandes en dos colores y sumar una camiseta en color neutro, así como unos chunky sneakers.
La top model Taylor Hill suele apostar por este tipo de diseño, solo que lo acompaña de playeras con imagénes de bandas de rock, chamarras de piel con estoperoles, medias largas y botas de cuero. Mientras que para acudir a la oficina, puedes elegir una falda de cuadros grises y mezclarla con un pullover sencillo, medias largas, botines y una bolsa de cadena. También puedes combinar esta prenda con una blusa de lazo y una chaqueta de tweed para conseguir un look más formal, ideal para alguna celebración o junta importante.
Foto: H&M
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De mini a micro
Es un hecho, las minifaldas son cosa del pasado. Esta temporada, firmas como Miu Miu, Blumarine y Max Mara reviven la microfalda , aquella que ganara popularidad durante los años sesenta. Una de sus características principales es su cintura baja, que acentúa aún más la sensualidad del cuerpo y deja al descubierto parte del abdomen. Hay marcas que apuestan por diseños con discretas aberturas al frente o sutiles tableados, así como por materiales de acabado brilloso.
Desde plata hasta verde limón, esta prenda se renueva para convertirse en la estrella de la temporada. Entre las opciones para combinarla están tops sin tirantes a juego, crop tops de tejido de punto, blusas de cuello alto y manga larga con prints retro, o blazers largos para utilizarse en contextos más formales. El calzado ideal para acompañar esta pieza son las sandalias de tacón alto o con plataforma, que estilizan la figura como por arte de magia. También se pueden complementar con un cinturón de cuero de estilo clásico.
Foto: Stradivarius
En versión híbrida
De la unión de falda (skirt) y short nace la ‘skort’ , una pieza híbrida que fusiona la comodidad de un pantalón corto con la sensualidad de una mini. Esta temporada, la encontramos en dos versiones: la falda que esconde detrás unos shorts o los pantaloncillos que se asoman debajo de la mini. Si bien los colores básicos (negro, blanco, gris y marino) son buenas opciones para lucir esta prenda, también hay un abanico de tonalidades para elegir: azul cielo, púrpura, verde militar y crema, sin dejar fuera los diseños con estampados de cuadros, rayas y flores.
Este modelo de falda se adapta tanto a situaciones casuales, mediante una blusa de cuello V con transparencias y botines altos, como para llevar al trabajo, combinada con una camisa blanca o una chamarra corta de tweed y unas plataformas. De igual manera, puedes darle un giro contemporáneo a través de una blusa de mangas aglobadas o un crop top tejido o con incrustaciones de cristales, al estilo de Prada durante esta temporada.
Foto: Bershka
A medio camino
La falda midi es una de esas prendas que provoca miedo usar debido a su largo tan específico: su dobladillo va debajo de la rodilla y puede llegar hasta los tobillos, sin sobrepasarlos. Contrario a lo que se cree, beneficia tanto a mujeres altas como bajitas (estas últimas deben preferir un largo que no rebase la media pantorrilla). Por lo general, sus líneas son sueltas (ligeramente acampanada a veces), aunque también hay versiones entubadas. En marcas como Massimo Dutti o Stradivarius encuentras desde modelos con cintura alta, plisados o aberturas a un costado.
Este tipo de falda luce bien con unos sneakers y una sudadera de cuello redondo, así como con una camisa blanca arremangada y unos tacones. A las influencers de moda les encantan los diseños abiertos al frente, acompañados de una camiseta sencilla, sandalias de tiras y un bolso estilo clutch. Otro look relajado puede integrarse por una pieza de color negro, una t-shirt blanca, una chamarra de mezclilla sobre los hombros y unos tacones puntiagudos y con pulsera.
Foto: Massimo Dutti
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