Confabulario aborda la relevancia del "guajolote" a través de nuestra cultura e historia. El guajolote fue uno de los pocos animales domesticados antes de la conquista española. Entrevistamos a los autores del libro "El guajolote en Mesoamérica", quienes estudian el rol de este animal dentro de los mitos y relatos de la tradición oral, su uso en las prácticas sacrificiales, sus plumas como adorno de las élites prehispánicas y cómo, en las últimas décadas, se ha convertido en el ingrediente principal de platillos ceremoniales.
Lee también: Mi vida en la Universidad Nacional Autónoma de México
Además, la figura del guajolote se ha plasmado en una amplía cantidad de testimonios visuales como códices pictográficos, esculturas de piedra, cerámicas, entre otras. También es la muestra del complejo intercambio cultural con Estados Unidos, pues si bien el pavo es un símbolo de la fiesta nacional de Acción de Gracias desciende directamente de los guajolotes domesticados en México.
"El guajolote se presenta "como agente, paciente, mediador, sustituto, encargado, emisario o artefacto" de identificaciones múltiples dentro de un contexto social muy amplio", señalan los investigadores.
Lee también: Sobrevivir el naufragio: Ethel Krauze