A los siete años, aun sin ser muy consciente de que eso fuera literatura, el escritor y periodista Vicente Alfonso descubrió a Mark Twain, lo hizo a través de El príncipe y el mendigo, allí comenzó su fascinación y obsesión por uno de los escritores que considera más potentes y, hoy, más vigentes, pero también de los más cuestionados y censurados. Algunas reediciones de sus obras, en especial "Las aventuras de Huckleberry Finn" han sido expurgadas por el uso del término “niger”, eso a Vicente Alfonso le inquieta, sin embargo, considera que tan enorme autor superará esos cuestionamientos porque es falta de visión y resultado de un movimiento pendular.
“No es la primera vez que lo sufre, en su época, poquito después de que se publicó Las aventuras de Huckleberry Finn ya estaba desafiando al libro, ya estaba siendo criticado; de hecho, el libro estaba programado para salir al mismo tiempo en Inglaterra y en los Estados Unidos, pero la edición norteamericana, que ya se estaba imprimiendo, tuvieron que retrasar su aparición por una serie de grabados que iban a acompañar a la novela”, señala Vicente Alfonso.
Incluso, agrega, esa misma novela que se considera la secuela de "Las aventuras de Tom Sawyer", fue muy criticada, apenas salió, y duró muchos años siendo prohibida por instituciones, como la Biblioteca Pública de Nueva York.
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“Lo que me lleva a pensar que yo creo que los autores pasan por su periodo de prueba de fuego, cuya memoria es cuestionada y a veces hasta un poquito llevada a la sombra, y luego vuelven, por supuesto no todos, pero yo creo que los grandotes, y no me refiero con esto a una cuestión de fama, sino de profundidad y de visión en su trabajo, esos van a volver y luego van a volver a ser desafiados y cuestionados, es un ciclo, es un movimiento pendular”, asegura el escritor que acaba de publicar Mark Twain: Un viaje a contracorriente, un viaje por la vida y la obra del narrador nacido en Missouri en 1835.
Esta “feliz guía de lectura” de la literatura y la biografía de Twain es coeditada por la Fundación para las Letras Mexicanas y Grano de Sal. Es resultado de un ciclo de conferencias dictadas en la Casa Estudio Cien Años de Soledad, y es, además, una obra fundamental para entender a uno de los padres de la literatura, podría denominarse el padre de la autoficción y un escritor que en su momento se convirtió en un autor que encarnaba lo norteamericano.
Vicente Alfonso asegura que “hay un Twain oscuro y un Twain muy crítico con la iglesia, muy crítico con las políticas de intervención de los Estados Unidos y que ha permanecido totalmente amordazado”. Y para él eso lo mantiene como un escritor cuestionado. “La misma novela Las aventuras de Huckleberry Finn, que es tan cuestionada y expurgada, es una defensa de la integración racial, una defensa del pensamiento crítico”, incluso señala que ante esa incomprensión habría que recuperar la propuesta de Tony Morrison para entrar a Twain, quien decía “no se trata de prohibir o permitir nada más, sino de acompañar, lo mejor es la lectura acompañada”.
Vicente Alfonso señala: “A mí lo que me sorprende mucho es que a finales del siglo XIX hubiera un autor con semejante conciencia crítica” y esa justo es para él una de las grandes virtudes de Twain, “él no se callaba nada, y eso le ha traído muchísimas críticas”.