A partir de “El arte y lo sagrado”, uno de los ensayos que el escritor mexicanoescribiera sobre arte --otra de sus grandes pasiones además de la literatura--, ocho creadores: Juan Antonio Rosado y Carmen Leñero, Pablo Soler Frost y Humberto Beck, Fernando Gálvez y Esteban García, José Manuel Velasco y Carla Faesler, moderados por Daniel Goldin, participan en el ciclo de conversaciones “El arte y lo sagrado”, que forma parte de la Cátedra Juan García Ponce de la UAM Cuajimalpa, cuyas conversaciones se congregarán en un libro.

Phillipe Ollé-Laprune, coordinador de la Cátedra Juan García Ponce, creado en 2022, en colaboración con la esposa y la hija del escritor, asegura que el ciclo que se lleva a cabo durante cuatro jueves, a las 19 horas, en el Centro Cultural Casa del Tiempo, desde el pasado jueves 10 de agosto y hasta el jueves 31 de agosto, explora la relación entre el arte y lo sagrado, que tanto interesó a García Ponce.

“A partir de lo que él planteó y de lo que él vio, era un ensayista muy apasionado del arte, especialmente de la pintura y la escultura de lo que escribió mucho, se nos ocurrió invitar a personas a hablar de ese tema, de perfiles bastante distintos, y vamos a tener esas cuatro pláticas en La Casa del Tiempo con los ocho autores que hemos escogido y se van a recopilar los textos en un libro que se va a publicar en coedición”, asegura Ollé-Laprune.

Foto: UAM Cuajimalpa.
Foto: UAM Cuajimalpa.

Lee también:

El promotor cultural, que también es jefe de Proyecto de Vinculación Social de UAM Cuajimalpa, dice que el propósito de los ocho creadores que participan, es tratar de entender las claves que da García Ponce para ver cómo se relacionan ambas cosas y partir de ahí plantean su acercamiento. “Hay tonos muy distintos, algunos son muy personales, en una primera persona muy asumida, otros se acercan más al mundo académico y es un trabajo más basado en el pensamiento; está Esteban, que es el hijo de Fernando García Ponce, el hermano que era pintor, él hizo un texto que mezcla un poco lo personal, familiar y con lecturas muy ligadas a García Ponce como Bataille”.

El ciclo “El arte y lo sagrado”, que hoy lleva a cabo su segunda sesión con la participación de Pablo Soler Frost y Humberto Beck, moderados por Daniel Goldin, es parte de los varios proyectos que tiene la Cátedra que nació tras darse cuenta que Juan García Ponce no está muy contemplado como pensador y está un poco olvidado un poquito o demasiado puesto de lado. Entonces en colaboración con Mercedes, su viuda, y Mercedes, su hija, pensaron en una serie de actividades “que no están para celebrar a García Ponce, más bien a usarlo como una herramienta y leerlo de manera activa”.

El año pasado, en el Centro Cultural Casa Galván montaron una exposición de los cuadros que le importaban a Ponce de su colección, en la que explicaban cada uno con base en lo dicho por el escritor; este año llevan a cabo este ciclo de conversatorios del que se editará un libro, y además se produce una serie con seis entrevistas documentales realizadas por Daniel Goldin con artistas como Roger van Gunten y Francisco Castro Leñero, en donde hablan de su relación con García, pero sobre todo de su relación intelectual, de cómo la escritura de García Ponce y cómo escribía sus obras fue útil para su trabajo de artista, cuenta Phillipe.

“Yo creo que hay demasiadas celebraciones de autores, casi como si fueran ídolos, aquí está al revés, es utilizar especialmente su pensamiento, sus ideas y su obra para generar discusión y análisis, lo muy importante es mostrar el lado vivo de su pensamiento”, afirma el coordinador de la Cátedra.

Lee también:

UAM Cuajimalpa escucha su entorno

Otro proyecto de la UAM Cuajimalpa, que se presentó la semana pasada, es “Radio Alternativa Sierra de las Cruces”, un proyecto sonoro que impulsa la Universidad con el artista otomí Carlos Dávila y que consiste en producciones para internet sobre Sierra de las Cruces y Montealto, región serrana que rodea a la UAM Cuajimalpa, habitada por pueblos otomí, nahua, matlatzinca y mazahua, pero también por la migración interna que atrajo a cientos de familias mixtecas y zapotecas, y a comunidades judías y árabes.

Las voces, historias, tradiciones y problemáticas de los habitantes de la Sierra de las Cruces y Montealto, que es considerado el espinazo serrano que une y separa a los estados de Morelos, México y a la Ciudad de México, cuenta con un patrimonio biocultural extraordinario y único en el país que ahora se dejará escuchar a través de esta radio alternativa que coordina la UAM Cuajimalpa, desde el departamento de Vinculación Social, que dirige Phillipe Ollé-Laprune.

“Todas las universidades tienen un problema de relación con su entorno directo, como si fuera algo un poco encerrado en sus paredes, nuestro rector, Octavio Mercado, le dio muchísima importancia a la idea de conectarnos con el entorno, estar más en sintonía con lo que se hace alrededor y especialmente reconocer trabajos, movimientos, colectividades que están creando muchas cosas, resistencias muy fuertes, y entonces nació esa idea de organizar, con una tecnología muy sencilla por internet, una radio comunitaria, una radio alternativa donde vamos a poner muchos podcast, entrevistas, la gente ya está participando, ya tenemos bastante cosas grabadas y que poco a poco vamos a dar a conocer”, apunta el promotor cultural.

Foto: UAM Cuajimalpa.
Foto: UAM Cuajimalpa.

Dice que la idea es ser facilitadores de comunicación para una población que los circunda, y por ello califica a este proyecto como “un puente muy bello y muy noble”. El proyecto implica conformar un archivo sonoro. “Es bastante interesante sentir que estamos más integrados y más en comunicación, en comunión con esos mundos que nos rodean y tenemos que conocernos. Hay muchas personas que no se hablan entre ellos, no se conocen bien, entonces ahí van a tener un punto de encuentro, un espacio donde sus palabras se van a conservar”, dice Phillipe.

Contrario a lo que se señala de que estos mundos indígenas o comunitarios van a desaparecer, Phillipe Olle-Laprune, dice que será al revés porque tienen muchísima fuerza, “pero se tienen que dar a conocer y más que todo usar tecnologías como las que les vamos a poner a disposición para tender estos puentes con comunidades, con la diversidad cultural”, apunta.

Lee también:

Comentarios