La historia de Trino sucede en el pueblo rural de Tonantzintla, Puebla, hace un siglo, en los años del México revolucionario, cuando enfermedades como la viruela y la polio tenían un impacto mayor en la sociedad. Justo la viruela provoca la muerte de los padres de Trino y deja cicatrices en el rostro del niño; marcas que hacen que sea discriminado y visto como un niño que no es común. Trino crece con resentimiento y enojo debido al poder de la apariencia y la crueldad de un entorno del que constantemente recibe burlas y críticas.
A grandes rasgos, éste es el argumento que Paulina Soto, autora de “Trino en búsqueda de su poder interior”, describe. La creación de esta pieza, inspirada en el cuento “El angelito feo”, escrito por su abuela materna, es una de las formas en las que Soto conecta con su propio linaje de mujeres escritoras: “Trino es el personaje de un cuento de niños que mi abuela escribió y del que habla para describir toda la cosmogonía y las escenas que ocurren en la obra”.
“Trino” es, abunda la también actriz y productora, “una importante representación de la mexicanidad, de nuestra cultura, del barroco mexicano en la iglesia de Santa María Tonantzintla, en todo el arte, las ilustraciones y, sobre todo, en la música”.
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Vale la pena aclarar que Trino es un títere de un poco más de un metro de altura, y que los actores en ciertos momentos interactúan con el dispositivo multimedia y, en otro, con marionetas, teatro de sombras y títeres para describir diferentes niveles de realidad.
A pesar de ser una obra pensada para un público infantil, las preguntas a las que enfrenta al espectador también atañen a los adultos. Una pregunta concreta: ¿Qué es lo que hace cantar a mi corazón? sirve para trazar el viaje del héroe por el que es conducido Trino: “Él va a buscar su poder interior y para encontrarlo necesita saber qué es lo que hace su corazón cantar; qué significa poder escuchar su interior, saber qué le enoja y el proceso del autoconocimiento básicamente: asimilar distintas emociones y reconocerlas; saber cuál es su poder y qué es la felicidad, la empatía y la compasión”.
El elenco de la obra, cuenta Soto, es de primer nivel y tiene eco internacional; es un “proyecto de alto nivel artístico que vale mucho la pena y tiene distintos niveles de entendimiento. Nadie se va a aburrir”.
“Trino” es dirigida por Albeto Lomnitz y puede verse hasta el 30 de julio, los sábados y domingos, a las 11:00 y 13:00 horas, en el Foro Shakespeare. El elenco está conformado por Clarissa Malheiros, Conchi León, Paulina Soto Oliver y Ángel Luna; los títeres fueron hechos por Humberto Galicia, y la música original y el diseño de audio estuvo a cargo de Ricardo Lomnitz.
melc