Todo buen mexicano sabe que una de las partes preferidas de esta temporada es la venta de pan de muerto. Existe, por supuesto, el pan tradicional que simula la forma de los huesos y que se recubre con azúcar blanca o canela, pero también hay ciertas variedades: los experimentos culinarios típicamente mexicanos y algunos locales donde la tradición nunca ha dejado de estar presente.
Ya sea para colocarlo en la ofrenda o para comerlo en casa, estos tres locales imperdibles venden pan de muerto en la CDMX para todos los gustos.
El clásico
La pastelería Ideal es uno de los locales de pan más viejos de la ciudad (este año celebra su 95 aniversario). Sus fundadores quizá no hubieran imaginado que lo que empezó como un pequeño local, hoy es una panadería tradicional de México con dos sucursales en el centro de la capital (Av. 16 de septiembre 18 y República de Uruguay 74) y tres en el Estado de México (Av. Hank González 773, Boulevard de los Aztecas 141 y Avenida Adolfo López Mateos 172).
Quienes buscan pan tradicional de muerto lo encontrarán aquí a un precio accesible.
El regional
Todos sabemos que en Oaxaca, uno de los corazones de la cultura mexicana, el Día de Muertos es imperdible. Los locales donde se lleva un pedacito de su gastronomía a la urbe son imperdibles. Y uno de estos es Pasillo de Humo, local especializado en comida oaxaqueña (Av Nuevo León 107, Hipódromo).
El imperdible aquí es, por supuesto, el pan de muerto oaxaqueño. Un pan de yema al que se le incluya “la ánima” (un muñeco, una figurita que se le coloca al pan y que representa a una persona fallecida). No hay que dejarse apantallar porque el local está en la Conde. El pan oaxaqueño, en particular, se ofrece a un precio accesible aquí.
También venden pan de muerto relleno. Está hecho con masa tradicional y, al interior, tiene licuatole, una mezcla de atole de maíz con piloncillo y canela. Va acompañado con crema de café de olla y cacao esparcido en la superficie del pan.
El extravagante
Balta es un restaurante de lujo que destaca por su carta internacional y la originalidad de sus recetas. Se encuentra en el Hotel Sofitel Mexico City Reforma (Av. Paseo de la Reforma 297, Cuauhtémoc) y su pan de muerto es algo que se puede ver pocas veces en la vida.
Un pan que, no por ser único, deja de rendirle tributo a la gastronomía nacional. Sus ingredientes son, ni más ni menos, mole y un relleno cremoso hecho a partir de la flor de Cempasúchil. No sería extraño que un par de muertos volvieran al mundo material sólo para absorber el espíritu de este pan.