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cultura@eluniversal.com.mx
El Plan Nacional de Desarrollo (PND), enviado por el presidente Andrés Manuel López Obrador a la Cámara de Diputados el pasado martes, tiene el objetivo de “promover y garantizar el derecho humano de acceso a la cultura” y “atender la diversidad cultural en todas sus manifestaciones y expresiones”. Para conseguirlo, dice el documento, se plantean siete estrategias como “redistribución de la riqueza cultural”, “profesionalización artística y cultural de los individuos, comunidades, colectivos y trabajadores de la cultura”, “ampliar la oferta cultural a lo largo del territorio nacional y desarrollar el intercambio cultural de México con el extranjero”, “salvaguardar y difundir la riqueza patrimonial de México”, “fortalecer las industrias culturales y empresas creativas”, “optimizar el uso de la infraestructura cultural pública” y “reconocer, preservar, proteger y estimular la diversidad cultural y lingüística de México”.
Para el especialista en legislación cultural Arturo Saucedo, “hay buenas intenciones”, pero considera que el problema es que no está definidos los cómos, no están los programas y no están definidas las políticas de Estado. “Todo está en términos inmateriales, con conceptos muy ambiguos. ¿Dónde está la operación?, ¿de dónde saldrán los recursos? No hay una prognosis, se habla de ahora al 2024”.
Saucedo sostiene que en el gobierno de Calderón se planteó un programa para atender zonas de conflicto social, ahora es una de las políticas más importantes de esta administración. “No es ninguna novedad, la secretaria de Cultura, cuando fue directora de Culturas Populares, participó de una manera coejecutora en el programa de paz que se llevó millones de pesos, cuyos resultados a la fecha son prácticamente nulos. No hay integración de las experiencias anteriores y de lo que está por hacerse, no se han aterrizado en los principios constitucionales ni en la arquitectura legislativa”.
Bolfy Cottom, antropólogo y especialista en legislación cultural, coincide con Arturo Saucedo, y agrega que el contenido relacionado con la cultura en el PND “refleja el pensamiento que representa los elementos y factores que desde el 1 de diciembre ha planteado el Presidente, en ese sentido no hay nada nuevo bajo el Sol. Obviamente no es suficiente el papel de la cultura en el Plan”.
Cottom indica que en el PND cambia el sentido de la cultura en comparación con la administración de Vicente Fox, cuando “se terminaba privilegiando una visión elitista de la cultura. Aquí se incorpora el principio de aceptar que todos los individuos poseen y generan cultura. Además plantea que la difusión del arte ahora se tiene que llevar a cabo en barrios, comunidades, pero con qué cuenta para hacerlo”.
En ese sentido, Cottom dice que la presencia de la cultura en el PND impactará en el presupuesto “para mal. No creo que la cultura tenga mayor presupuesto del que ha tenido. La comunidad cultural, ahora que se presente el Programa Nacional de Cultura, tendrá que discutirlo, desglosarlo y proponer aspectos concretos”.