ha intentado ver la rabia en todos los ámbitos, privados y públicos, en el dominio de las artes o la música, de la, pero también de la pareja, la familia, la política, las redes sociales, la academia y la empresa. Esa es la meta de los seis cuentos que integran "Enrabiados", el libro que ha publicado con Páginas de Espuma y que lo devuelve al cuento que practicó muy joven, a principios de los 90. El escritor mexicano quería ir a los orígenes para ver cómo opera la rabia en tiempos tan violentos como los mexicanos y los del mundo.

“Son cuentos satíricos, de una u otra manera, donde el humor, así sea un humor negro, termina por filtrarse; pero hay otro tema, las redes sociales y más que ninguna Twitter, porque nuestra época ha trasladado la discusión pública a este medio privado, toda nuestra vida pública pasa por Twitter, la política, la discusión intelectual, la discusión social, y exacerba todas las emociones, en especial la rabia”, dice Volpi.

El escritor Jorge Volpi. Foto: Especial.
El escritor Jorge Volpi. Foto: Especial.

El autor de "En busca de Klingsor"asegura que es una red construida para decir muy pocas cosas en muy pocos caracteres y en pocas palabras, lo que fomenta que todo sea intempestivo y no interesen los matices ni las zonas grises, “que interesen sólo los titulares, o lo que es más divertido o más ultrajante; favorece, por lo tanto, también el anonimato, utilizar personalidades que no son las propias o utilizar incluso bots, es decir, perfiles que realmente no existen y son inventados por alguien en beneficio o perjuicio de otra persona”.

Lee también:

Esa rabia en las redes sociales habita en buena parte de las seis historias de Enrabiados, sobre todo en un país, dice Volpi, que de por sí tiene condiciones de violencia, tan drásticos como el nuestro, pues todavía más.

“En términos de violencia política, eso está en todas partes, lo vimos en Estados Unidos y lo vemos ahora en México, lo que solemos llamar polarización, esta división de la sociedad en dos, que no nos había pasado en México porque teníamos un sistema que parecía tripartidista y no bipartidista, pues ahora lo vemos porque el país está dividido en sólo dos grandes bloques”.

La crítica de fondo es que la rabia nos posee por completo y cancelamos otras emociones y sentimientos como la empatía, la compasión y la simpatía misma hacia los otros.

“Estamos tan poseídos por la rabia que no somos capaces de ver que los otros tienen esa misma rabia equivalente. Es un poco el objetivo del libro, al ser una sátira, no deja de estar el elemento del humor para darnos cuenta que cuando estamos enrabiados, enojados, encabronados, diríamos nosotros, nos volvemos también ridículos”, concluye Jorge Volpi.

Foto: Especial.
Foto: Especial.

Lee también:

Comentarios