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¿Quién manda en el Museo Cuevas?
Como lo hemos dicho aquí, el Museo José Luis Cuevas opera sin rumbo. Al reciente cuestionamiento sobre la supuesta venta de obras de su acervo se suma ahora el señalamiento directo de la Auditoría Superior de la Federación en su informe 2016, que encontró que este Museo, como donatario, destinó los recursos que había recibido para actividades artísticas y culturales, a otros fines: nómina, vigilancia y limpieza... La cantidad es de un millón 373 mil 148 pesos, de la que no hubo comprobantes. Nos recuerdan que cuando murió el artista (3 de julio de 2017), una promesa de las autoridades de Cultura de la Ciudad fue trazar un nuevo proyecto para el Museo, pero nada de eso ha pasado. Tampoco se han movido los integrantes de la Fundación Maestro José Luis Cuevas Novelo, A.C. constituida en 2003, y que como muchos ha permitido que recinto hoy esté en el olvido.
Reveladores datos de la Auditoría
En estas páginas hemos consignado lo más relevante del informe de la Auditoría, pero hay cifras que dan idea del gasto que se hace en las instituciones culturales y que iremos compartiendo. Por ejemplo, de enero a noviembre de 2016, el INBA arrendó 12 inmuebles para uso de las diferentes áreas de su adscripción por casi 62 millones, de ese monto, un millón 205 mil fue para la renta de 70 cajones de estacionamiento ubicados en el Auditorio Nacional, y es que a un costado de ese foro están las oficinas centrales de la dependencia. El monto no es irregular, salvo porque diciembre se pagó con el ejercicio fiscal de 2017, pero sí es revelador. Otro dato indica que el INBA pagó 594 mil pesos en 2016 por “servicios para coadyuvar a establecer el enlace con el talento artístico de la Orquesta Sinfónica Nacional y sus invitados nacionales e internacionales”. Tampoco es irregular, pero es, digamos, interesante.
