Plácido Domingo
se presentará en el Conjunto de Artes Escénicas para rendir un emotivo homenaje a su madre, la cantante Pepita Embil, con motivo del centenario de su natalicio.
En este espectáculo, el tenor dirigirá a la Orquesta Filarmónica de Jalisco, con la participación especial del Coro Municipal de Zapopan el próximo 2 de diciembre en la sala que lleva su nombre.
Domingo ha preparado con especial esmero este reconocimiento a la vida y trayectoria de Pepita Embil, quien lo ligó fuertemente a México. La primera vez que dirigió el Réquiem de Verdi con este fin fue en febrero de este año, en un homenaje preparado por Donosia a su madre.
Para la interpretación en el recinto universitario, Plácido Domingo contará también con la compañía de las voces de la soprano Maria Katzarava y la mezzosoprano Nancy Fabiola Herrera.
Así como el tenor Arturo Chacón-Cruz y el bajo Nicholas Brownlee , la mayoría de ellos ganadores de diferentes premios en el Concurso Operalia convocado por el propio Domingo.
Pepita Embil Echaniz nació en la localidad marinera de Getaria, en el País Vasco, el 28 de febrero de 1918, y falleció en México el 28 de septiembre de 1994.
Estudió en el Conservatorio de San Sebastián, cantó en el Orfeón, en el coro Eusko Abesbatza y en Eresoinka, y después emprendería una larga carrera, íntimamente unida al llamado género chico, hasta el punto que en México, donde se afincó con su familia en los años 40, se le consideró la Reina de la Zarzuela.
En 1974 se retiró de los escenarios y tanto en 1988 como en 1990 recibió sendos homenajes en Donostia.
Plácido Domingo es ampliamente reconocido por su carrera como cantante de ópera, que lo ha llevado a conquistar los más grandes escenarios del mundo.
Como director de orquesta, se ha subido al podio de la Ópera Metropolitana de Nueva York , del Covent Garden de Londres, de la Ópera del Estado en Viena y de la Ópera de Los Ángeles, entre otras.
También ha dirigido música sinfónica con orquestas como la Sinfónica de Chicago, la National Symphony, la Sinfónica de Londres y la Filarmónica de Berlín.
Verdi escribió este Réquiem en 1873
en memoria de su amigo Alessandro Manzoni, fallecido ese año. Se ha dicho de esta obra, en un juego de palabras, que es “la mejor ópera de Verdi” o “una música sacra irreverente”.
akc