El museo sobre la Historia de los judíos polacos de Varsovia, conocido como POLIN, ha lanzado un concurso de cortometrajes orientados a mostrar los lazos entre los judíos de origen polaco con Polonia, una iniciativa que coincide con la crisis diplomática entre Varsovia y Jerusalén.
Se estima que tres de los seis millones de judíos que fueron asesinados durante el Holocausto eran polacos.
La iniciativa se produce en plena crisis entre Varsovia y Jerusalén, a causa de las declaraciones del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, quien, el pasado 14 de febrero, dijo en Varsovia que los polacos colaboraron con los nazis en el Holocausto.
En la actualidad nueve millones de judíos, que viven repartidos por todos los rincones del mundo, son de ascendencia polaca y antes del estallido de la Segunda Guerra Mundial Polonia contaba con la comunidad judía más grande de Europa.
"Esperamos que estos cortometrajes muestren los lazos de las comunidades judías actuales con Polonia, hogar durante siglos de la comunidad judía más grande y significativa del mundo, y centro de la cultura judía gracias a un largo período de tolerancia religiosa y autonomía para los judíos", explicaron a Efe fuentes del POLIN.
Los cortometrajes deben tener una duración inferior a los 5 minutos.
El museo de Historia POLIN es el primero de Polonia dedicado a los mil años de historia de los judíos polacos.
Las palabras polémicas de Netanyahyu sobre Polonia y los nazis generaron un intercambio de acusaciones que llevaron a que se suspendiese la cumbre del Grupo de Visegrado (formado por la República Checa, Hungría, Eslovaquia y Polonia), que debía tener lugar una semana después en Jerusalén.
La polémica se amplió y a las afirmaciones de Netanyahu se sumaron las de su ministro de Exteriores en funciones, Yitzhak Shamir, quien afirmó que "los polacos maman el antisemitismo de la leche materna".
akc