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Río de Janeiro. —Tiempo, paciencia y dinero. Estos son los pilares de la reconstrucción del Museo Nacional, en las palabras de la jefa de la misión de emergencia de la UNESCO, Cristina Menegazzi.
Los profesionales del mercado de restauración estimaron que el costo para volver a erigir el Palacio de la Quinta da Boa Vista puede superar los 24 millones de dólares. La tarea es compleja porque involucra, además de aspectos relativos a la ingeniería, conservar detalles patrimoniales, y eso interfiere en la elección de la técnica constructiva y hasta en el tipo de materiales a usar.
Se calcula que alrededor del 80% del techo y el 60% de los pisos del museo fueron destruidos. Después de la protección de lo que queda del inmueble, que se hará reforzando estructuralmente las paredes e instalando una cubierta, el primer paso para traer a la vida el espacio será el inicio de un trabajo arqueológico.
“Serán meses de un trabajo minucioso en las ruinas, y si tenemos la suerte de encontrar muchas cosas, nos puede exigir más de un año; es un trabajo lento para el rescate de las piezas, que también incluyen pedazos del edificio, que serán recogidos, identificados e inventariados” explicó la jefa de la misión, añadiendo que esas piezas podrán ser escaneadas para facilitar su identificación e incluso congeladas para garantizar su preservación.
Técnicos de la UNESCO viajaron a París, donde presentarán propuestas para la seguridad de los museos. La entidad va a coordinar una campaña internacional para conseguir fondos, especialistas y acervos para el museo de Quinta da Boa Vista. Una cruzada que sólo será exitosa si el gobierno brasileño pone en práctica planes de protección y combate a incendios, que son fundamentales también para otras instituciones en riesgo.
“Ese no es sólo un problema de Río o de Brasil. Se invierten mucho más recursos en obras de restauración, en glamour, que en obras de prevención, tiene que haber un cambio de mentalidad”, comentó Menegazzi.
Las cifras cambian. Por su parte, el especialista en proyectos de restauración Carlos Fernando de Andrade, ex superintendente del Instituto del Patrimonio Histórico y Artístico Nacional (Iphan) en Río, calcula que se necesitan cerca de 27 mdd para la recuperación del edificio con base en su área, que es de más de 10 mil metros cuadrados. Sin embargo, el ingeniero Eduardo Pompéia, de la Bolsa de Inmuebles de Río, estima un valor de entre 17 y 28 mdd.
El jueves, el Ministerio de Educación liberó poco más de 2 mdd para las obras de emergencia. Al día siguiente, se firmó un contrato para comenzar la primera etapa de la intervención. Ahora, el director del Museo Nacional, Alexander Kellner, cuenta con la promesa de recursos por parte de la bancada federal de Río.
Cada uno de los 46 diputados se comprometió a presentar poco más de 56 mil dólares para las obras, lo que daría un total de más de 2 y medio mdd. Además de la campaña internacional por recursos emprendida por la UNESCO, una campaña local será conducida por el Gobierno Federal.
“Tener un museo hermoso y maravilloso llevará tiempo y costará mucho dinero, hay que tener voluntad política”, dijo Kellner, para quien el Museo Nacional post-tragedia no debe ser exactamente como el de antes. “Va a ser un museo de historia natural y antropología, eso no cambia, pero no va a ser un edificio en ruinas ni un palacio lleno de detalles” dice Kellner, quien buscar un sitio que albergue una exposición con piezas que, por haber estado en otras áreas del museo, se salvaron del fuego.
