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yanet.aguilar@eluniversal.com.mx
De nuevo, Francisco Martín Moreno llega a echar luz con sus novelas a uno de los más vergonzosos episodios de racismo, esclavitud y despojo que tiene la historia de México. en su nueva novela México esclavizado, el narrador mexicano aborda uno de los momentos menos trabajados, ocurrido en las haciendas de Yucatán.
A través de Olegario Montemayor, hijo del productor de henequén más poderoso de Yucatán, Martín Moreno se adentra en estos hechos ocurridos en el sureste del país, pero para llegar a este episodio negro de México traslada a su personaje a la Inglaterra victoriana de principios del siglo XX para estudiar en Oxford, donde conoce a Marion Scott, una de las pocas mujeres estudiantes en esa universidad, que lo deslumbra y contagia con sus preocupaciones sociales y juntos, viajan a Yucatán para descubrir una brutal realidad imposible de combatir desde las aulas.
Estos hechos Martín Moreno los comenzó a descubrir cuando hacia la investigación para su anterior novela México engañado. Ahí aparecieron poco a poco datos de esa esclavitud que prevaleció en las haciendas henequeneras de México, pero que representan esclavitud en otras haciendas como las chicleras, las haciendas tabacaleras, cafetaleras, bananeras y madereras, entre otras.
“Me di cuenta que era la impunidad total dentro de un contexto de ausencia de un estado de derecho, estado de derecho que tampoco tenemos hoy en día en México. Ese es uno de los gritos de protesta de este libro”, señala el narrador en entrevista sobre México esclavizado, la novela publicada por Planeta.
Francisco Martín Moreno cuenta que el principal terrateniente de Yucatán se llamaba Olegario Molina y que aunque había mil haciendas henequeneras en el estado, él era quien compraba todo y acaparaba la producción de henequén; un hombre que llegó a ser el gobernador del estado de Yucatán, y secretario de fomento con Porfirio Díaz. “En mi novela Olegario tenía un hijo idealista que va a estudiar a Oxford y ahí conoce a una bella mujer”, señala.
El también autor de México negro, México sediento y México mutilado dijo que este libro tiene muchísima actualidad porque nos damos cuenta que hemos evolucionado en materia laboral pero no a la velocidad que se necesitaba; y por ello se entiende el resentimiento que hay en México. “Somos un país muy resentido. Nosotros no hemos trabajado en este resentimiento”.
Y asegura que para trabajar en ese resentimiento se tiene que conocer el problema y para conocer el problema se tiene que conocer la historia de México. “Cuando a través de la historia conoces el problema podrás definir cómo atacarlo y resolverlo. En la escuela tenemos que entender nuestro pasado. El gran drama de esto ha sido la ignorancia, la falta de educación. Cuando llega Iturbide al poder 98% de los mexicanos no sabe leer ni escribir, Cuando echamos por fin de México a Porfirio Díaz, 85% de los mexicanos no sabía leer ni escribir, hasta que llega Obregón junto con Vasconcelos fundan la Secretaría de Educación Pública y entonces hay una mayor democratización del conocimiento”, asegura el escritor.
El columnista de EL UNIVERSAL dice: ”fracasó la educación y fracasó fue el estado de derecho” y por eso ve con preocupación que hay 54 millones de mexicanos hoy en la pobreza. “Es la mejor fórmula para que vuelva a estallar una revolución”.