En 1989 Walt Disney llevó a la pantalla grande una película que se transformó en uno de sus clásicos: "La Sirenita" ( "The Little Mermaid" , en inglés), que cuenta el amor de una pequeña sirena por un humano.
La cinta con personajes icónicos como el Rey Tritón , el cangrejo Sebastián, el príncipe Eric y la bruja del mar Úrsula fue bien acogida por el público, aunque marcó una distancia de lo sucedido en el cuento de Hans Christian Andersen , obra en la que se basó Disney para su trabajo.
Tanto en el relato como en el largometraje Ariel tiene un gran interés por conocer la superficie pues siempre ha vivido debajo del agua. Cuando lo logra, pues cumple la edad suficiente para hacerlo, conoce a un hombre del que queda profundamente enamorada. Ella se acerca a una bruja que le permitirá estar en la tierra pues cambiará su cola de pescado por un par de piernas, aunque a cambio debe otorgar su voz, que es considerada la más hermosa del reino.
En el cuento la bruja le advirtió a Ariel que podría seguir en la tierra si es que el noble se casaba con ella, aunque si éste contraía nupcias con otra mujer, la sirenita desaparecería en el agua como la espuma de una ola .
Los eventos que van sucediendo fuera del agua son los que van abriendo la brecha entre las dos narrativas, pues mientras en el filme los dos jóvenes se enamoran y luchan por estar juntos, en la versión del escritor danés hay un sentimiento de aprecio, pero no de amor.
Si bien la sirenita está enamorada del príncipe, él al volver a verla le demostró su cariño y su gratitud con muchas atenciones, aunque el corazón del joven pertenecía a otra mujer que había partido a su país.
Sin embargo posteriormente la doncella regresaría en una gran nave y la Sirenita sintió un gran dolor en el corazón pues la recién llegada fue pedida en matrimonio. Desolada la sirenita se queda en la cubierta y se encuentra con sus hermanas, quienes le dan un arma para terminar con la vida del príncipe y así no desaparecer de la vida.
No obstante ella es incapaz de acabar con la vida de su amado y, dispuesta a desaparecer, escucha unas voces. La sirenita se convirtió en un hada y recuperó su voz.
nrv