El artista francés Jean-François Millet , el último pintor de la vida campesina , sembró las semillas del arte moderno como se refleja en la exposición presentada este miércoles en Ámsterdam , tanto que Vincent van Gogh , Claude Monet y Salvador Dalí se inspiraron en él e hicieron copias literales de sus obras.
Millet es uno de los artistas más famosos y mejor conocidos del siglo XIX , precisamente porque era "muy provocador por su forma de pintar a los campesinos y estaba muy comprometido con la vida del campo", explica a Efe Maite van Dijk , conservadora del Museo Van Gogh, que acoge esta exposición internacional inédita hasta enero.
Lo que caracterizaba a este paisajista de la Escuela de Barbizon no solo era el objeto de sus cuadros, que en sí suponía una interpretación de crítica social de la vida de campo , sino también -dice Van Dijk- "la técnica de pintura novedosa y radical", que fue tan admirada como criticada por tantos otros maestros .
Los que trabajan la tierra eran para Monet (1814-1875) unas figuras nobles y unos personajes heroicos , merecedores de más consideración, un análisis que se hizo obvio tras la publicación en 1881 de la biografía romántica " Millet, campesino y pintor ", escrita por el francés Alfred Sensier .
Los tradicionalistas objetaron su técnica cruda y la crítica social aguda que reflejaba, pero poco después de su fallecimiento, fue aplaudido como un héroe nacional que había logrado capturar el campo francés en toda su esencia y esplendor.
Lo que admiraban de él pintores como Van Gogh, Monet, Dali y Paul Gaugin es la "monumentalidad de las figuras y del paisaje, y su relación con la tierra", y aunque para cada artista la inspiración pueda ser una cosa diferente, la clave estaba en su visión humana de la vida , la relación que establecía entre el hombre y la naturaleza .
La exposición -que abre al público el viernes, coincidiendo con el 205 cumpleaños del artista francés - se centra en cómo el trabajo de Millet fue una inspiración para numerosos artistas de todo el mundo gracias a la naturaleza innovadora de su trabajo y el impacto que tuvo en generaciones de pintores.
El museo Van Gogh recuerda que Millet es hoy un gran olvidado para el público en general y su trabajo es visto como algo tradicional y antiguo, cuando en realidad, a finales del siglo XIX, representaba un arte moderno y progresista, tanto que fue el artista moderno más famoso del mundo, y fue inmortalizado en varias estatuas.
Su trabajo fue elogiado por diversas razones, desde sus composiciones innovadoras, su técnica antiacadémica , sus trazos de pintura en bruto, su uso del color y los materiales y el enfoque abstracto de la forma y la composición, hasta los temas que eligió para sus pinturas.
La muestra presenta 128 obras , de las que 53 son de Millet y un total de 108 son prestamos de museos y colecciones privadas de países como Japón, Estados Unidos, Francia y México . Las piezas son originales de artistas como Camille Pissarro, Edgar Degas, Paul Cézanne, Jan Toorop, Edvard Munch y Kazimir Malevich .
Dalí contaba que había estudiado en la escuela el cuadro de El Angelus (1857-1859), la obra más importante e innovadora de Millet, y que había soñado con esta pintura en 1930, lo que la convirtió en una especie de obsesión para él. Durante la siguiente década, hizo diferentes cuadros y dibujos, e incluso escribió textos sobre ella.
"Me parece algo muy positivo que en este siglo hubiera pintores como Millet, que es insuperable", dijo Van Gogh en una carta a su hermano Theo en 1890 . El maestro holandés quiso seguir sus pasos, convertirse en un pintor de campesinos, y copió varias de sus obras, algunas incluso 20 veces , hasta que empezó a hacer sus propias pinturas inspiradas en Millet.
Según explica la conservadora de la exposición, Van Gogh aprendió primero de la técnica de Millet y después "intentó traducirlo en colores nuevos y en algo más moderno, de sus propios tiempos, pero para él era un artista en el que inspirarse en todos los niveles".
Una de las piezas clave de esta muestra es " The Sower " (1850), un trabajo de Millet que no ha salido de Japón desde 1977 . El cuadro, que representa un campesino sembrando semillas, tuvo tal impacto en Van Gogh, que este acabó adoptando el tema en varias de sus propias obras.
nrv