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El escritor mexicano Guillermo Arriaga es, entre otras cosas, un fiel practicante del ritual de la cacería, cineasta, asiduo escucha de la música del guitarrista Jimi Hendrix , pero también "un adicto a la escritura", ejercicio que practica al igual que la lectura, y que nunca ha dejado.
"Crear algo nuevo donde no lo había antes, como es una página en blanco se convierte en una adicción", contó Arriaga.
"Es un deseo de contar historias y no parar", añadió el escritor, quien en estos días promueve en su país su más reciente novela, "Salvar el fuego" , la cual en enero le reportó el Premio Alfaguara 2020.
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Y precisamente esa pasión irrefrenable por escribir le hizo comenzar a trabajar en otra novela, avanzó unas 70 páginas, pero la suspendió para dedicarle toda su atención y concentración a la promoción de su nuevo libro.
"Ya estaba encarrerado, pero paré y dije: no, calma, necesito darle su espacio a 'Salvar el fuego' y al Premio Alfaguara", reveló el escritor, quien aseguró que ganar el premio le ha "honrado de sobremanera" y por ello se siente responsable de apoyar el libro y el premio.
Justamente en su más reciente novela, de 664 páginas, de tintes "shakespearianos" y ritmo trepidante, Arriaga relata una historia de amor en el México contemporáneo: la de Marina, una coreógrafa de clase acomodada casada y con tres hijos, con José Cuauhtémoc, un homicida condenado a 50 años de prisión.
Y a través de esta relación improbable, Arriaga retrata las paradojas de su país y las contradicciones más feroces del amor y la esperanza, un relato contado desde diferentes puntos de vista y en varios tiempos narrativos.
Acerca de su labor literaria, Arriaga dice que lo único que tiene que hacer a la hora de escribir "es poner mi mayor empeño, esfuerzo, concentración, rigor y disciplina".
Con esas herramientas, él se asegura que "la obra salga lo mejor posible".
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Dice que en sus manos está "trabajar con ahínco" y no está en mi manos, necesariamente, "que le vaya a gustar a alguien, pero si quiero que sepa (el lector) que hay un trabajo muy serio detrás de cada uno de mis libros".
Confinamiento, tiempo de reflexión
La aparición y promoción del nuevo libro de Arriaga ocurrió en plena propagación mundial de la COVID-19, escenario que considera una "oportunidad que nos obliga replantearnos varias cosas", entre ellas el tiempo que ahora tienen millones de personas en muchos países debido al confinamiento, al quédate en casa, que han pedido gobiernos y autoridades sanitarias.
"La literatura es una oportunidad de reflexionar y un libro es una de las mejores forma de mantener un diálogo contigo mismo", explicó.
Dijo que un buen libro funciona como "una especie de espejo que arroja luz donde la mirada no quiso posarse antes o no podía, además nos ayuda a ver cuestiones dentro y fuera de nosotros que no conocíamos
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Para Arriaga, el actual "es un momento inédito para esta generación", el cual nos va permitir reflexionar sobre "si realmente estamos en el camino que queremos o debemos dar un golpe de timón".
Para el autor de las películas "Amores perros", "21 gramos" o "Babel", este momento "puede provocar una reflexión personal, social o política, pero es un momento donde debemos reflexionar y los libros son fundamentales para este proceso".
Sobre sus distintas facetas, Arriaga, al final de la charla, se decidió por la de cazador y aseguró ser "un cazador que escribe porque antes de ser escritor fui cazador. Para mí la cacería es el cristal que me ha permitido entender el mundo, es un rito profundo, complejo, doloroso y a la vez, apasionante".