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Lo que hay de fondo tras las protestas contra la pieza “La Revolución” del artista Fabián Cháirez es la pregunta de ¿a quién le pertenece Zapata?, señaló el curador de la exposición “Emiliano. Zapata después de Zapata” , Luis Vargas Santiago, quien aseguró que la respuesta que muestra gráficamente la exposición es que Zapata les pertenece a todos los mexicanos, a las mexicanas, a los migrantes y a muchas causas sociales.
“¿Por qué es este Zapata el que genera controversia y no el Zapata guerrillero de Arnold Belkin , donde Zapata aparece como Lucio Cabañas, o un Zapata Speedy González? Es decir, hay algo que tiene que ver con un machismo y una homofobia que sí está privando en México y que en parte también es causa de la violencia de género , sistemática que sufrimos. Yo creo que esto se tiene que leer al lado de los radicalismos y las muchas violencias que tristemente aquejan a nuestro país y por las que han marchado tantos colectivos de compañeras feministas”, afirmó a EL UNIVERSAL el curador de la exposición.
El historiador del arte e investigador del Instituto de Investigaciones Estéticas de la UNAM , se planteó otras preguntas como ¿Porque monumentalizamos la historia? ¿Por qué los símbolos son intocables?, ¿por qué no son más bien un territorio de la negociación, del diálogo, de la disputa?
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Vargas Santiago aseguró que la obra de Cháirez ocupa un lugar importante al lado de otro conjunto de más o menos 10 obras que hablan de la subversión del género y tiene que estar al lado de otras piezas como la de Julio Galán , y los retratos de “Ricas y famosas” de Daniela Rossell porque dan cuenta de una parte del relato de cómo la imagen de Zapata se ha activado en los últimos 50 años. Sin eso estaríamos contando una visión a medias, es como si no hubiéramos incluido al Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) en esta revisión de las imágenes de Zapata”.
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Luis Vargas Santiago
atestiguó las protestas en Bellas Artes, la tarde de este martes dictaría una charla sobre la muestra pero tuvo que ser cancelada; fue allí que aseguró que son muy preocupantes las protestas y la petición de que la pieza se descuelgue.
“Acceder a eso sería acceder a un acto de censura, esa es mi opinión y creo que es la opinión de la directora del INBAL, Lucina Jiménez , de que los artistas tienen una libertad de expresión y esta institución debe garantizarla; quitar esta pieza de la exposición sería atender a un reclamo de intolerancia”, señaló Vargas Santiago.
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El curador dijo que la pieza de Fabián Cháirez ya había sido exhibida en la galería José María Velasco y también señaló que hay un gran mural que replica la misma imagen en un bar de República de Cuba, en el Marrakech, pero que allí no había causado el mismo escándalo “porque no se trata de los espacios centrales como Bellas Artes, por eso tengo la plena convicción de que estos discursos plurales tienen que habitar junto a otros discursos, en los espacios más importantes de esta país, como puede ser el Museo del Palacio de Bellas Artes ”.
fjb
