El proyecto para convertir al Centro SCOP en un parque cultural está siendo analizado, informó el Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (INBAL) a EL UNIVERSAL y aclaró que su rol es acompañar y, eventualmente, autorizar dicho proyecto, pero que la Secretaría de Infraestructura y Transporte (SICT) es “la responsable de definir los grupos de trabajo con quienes realizará” la obra.
En febrero, el grupo civil En Defensa del Centro SCOP anunció que la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transporte (SICT) y la Secretaría de Cultura, a través del INBAL, trabajan en un nuevo proyecto para rescatar los murales realizados por artistas como Juan O’Gorman, José Chávez Morado, Guillermo Monroy, entre otros, y convertir el espacio en un parque cultural con un auditorio, salones para talleres, gimnasio y restaurantes. Sin embargo, llama la atención que la presentación de un proyecto de esta magnitud —con demolición de edificios— haya sido hecha por un grupo civil.
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Desde el anuncio, las autoridades no han sido transparentes sobre el tema, pues se desconoce el costo de la obra, así como su autor y la empresa constructora. A través de cartas, especialistas y vecinos han pedido a las Secretarías más información.
Sobre el tema, INBAL dijo que han continuado el diálogo con autoridades de la SICT, académicos y vecinos, tan es así que para tramitar la Declaratoria de Monumento Artístico de los murales ya cuenta con “las cartas de anuencia por parte de la SICT y Telecom” y que fueron enviadas a la Consejería Jurídica de Pla residencia de la República para su revisión.
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El INBAL detalló que en la etapa de análisis de este proyecto participan la Subdirección General de Patrimonio Artístico Inmueble, la Dirección de Arquitectura y Conservación del Patrimonio Artístico Inmueble, así como el Cencropam. “El Instituto recomendó efectuar una consulta a los artistas vivos que participaron con sus obras en el Conjunto SCOP, así como la de otros especialistas en la materia de las distintas fases del proyecto”, agregó la dependencia, que también detalló que el movimiento de murales que se considera en la primera propuesta del proyecto deberá ser validado por ellos.
