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La Biblioteca del Museo Nacional de Antropología volverá, en estos días, a la normalidad, luego de que hace unas semanas se registraron goteras en algunas de las áreas que obligaron a colocar plásticos y cubetas, explicó Baltazar Brito, director del espacio. Además, Protección Civil realizó una visita para hacer una revisión y determinó que no había un “problema mayor”.
“Claro que hay preocupación, lo comprendemos, pero por eso se han hecho revisiones. En los últimos días no hemos tenido ya ninguna gotera. No podemos echar las campanas al vuelo, pero creo que la emergencia ya ha pasado, todo lo tenemos ya protegido, movimos lo que se consideró pertinente. La impermeabilización ya empezó y cada dos o tres días sube un grupo para ver cómo van las cosas”, indicó Baltazar Brito.
Hace unas semanas, trabajadores del recinto adscritos al Sindicato Nacional Democrático de Trabajadores de la Secretaría, el Sindicato Nacional de Profesores de Investigación Científica y Docencia del INAH y del Movimiento de Investigadores contratados del INAH denunciaron filtraciones de agua que obligaron a embalar el acervo en papel en cajas de cartón para prevenir algún daño inmediato; además se tuvieron que colocar mangas y protectores de plástico para desaguar el líquido hacia cubetas.
“Se echó una loza de cinco centímetros a una parte, en estos días se concluirá ese trabajo y esto va a solucionar muchas cosas porque ya no habrá goteras tan claras”, agregó.
Brito aseguró que tras las filtraciones sólo se afectaron 39 libros de época contemporánea y que en ningún momento hubo riesgo de daño a patrimonio invaluable.