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El artista ecuatoriano Pavel Égüez publicó este lunes en sus redes sociales dos fotografías en las que se observa el instante en el que la crítica de arte Avelina Lésper coloca una lata de refresco cerca de la obra de Gabriel Rico que exponía la galería OMR en la feria Zona Maco.
El pasado 8 de febrero, cuando se denunció en redes sociales la destrucción de la pieza de Gabriel Rico, Égüez publicó en su cuenta de Twitter que había sido testigo de la visita que realizó Lésper: “Acompañé la visita guiada de Avelina Lésper a la Feria de Arte Maco en CDMX. Lamentablemente al acercarse a una obra de Gabriel Rico, el vidrio que sostenía objetos explotó. Avelina no la tocó, un vidrio demasiado delgado y su débil estructura ocasionaron el incidente”.
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Por su parte, la galería OMR informó que se trató de “una enorme falta de profesionalismo y respeto”. Mientras que Avelina Lésper se disculpó a través de un video por la destrucción de "Nimble and sinister tricks", pero aseguró que no la había tocado, sólo había colocado una lata en el piso y luego la acercó a uno de los elementos de la obra.
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Para el curador Cuauhtémoc Medina “es irrelevante” si Lésper tocó o no la pieza, y la señala como “la causante de un daño material”. “Su vocación de no entender ni aprender no le permite ver que esta obra tenía una factura, una complejidad y una delicadeza que implica que tocarla era muy peligroso. Tampoco entiende que no es una obra reemplazable, desde su ignorancia desconoce que las cosas pueden estar hechas con condiciones de producción delicadas e irrepetibles. Entrar en los dimes y diretes de qué hizo y no hizo carece de importancia. La manera en la que ella enloda algo que tiene una claridad absoluta, su manera de relacionarse con las obras, con los practicantes y participantes del circuito cultural es totalmente inapropiada; la consecuencia de su vocación destructiva llegó al punto de dañar una obra”.