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En la playa, los sindicalistas arman grilla
No rindió muchos frutos, nos cuentan, el congreso de representantes del Sindicato Nacional Democrático de Trabajadores de la Cultura. Celebrada la semana pasada en Boca del Río, Veracruz, con el fin de revisar los estatutos de ese sindicato, la reunión acabó con un desencuentro entre representantes de los trabajadores del Instituto Nacional de Bellas Artes y del Instituto Nacional de Antropología e Historia. Tan fuerte estuvo aquello que se tendrá que hacer un congreso extraordinario para continuar la revisión de estatutos y abordar otros pendientes que, en las circunstancias actuales y futuras de la Secretaría, no son pocos. Hay muchas inquietudes entre los trabajadores, desde lo que tiene que ver con salarios hasta el tema de movimientos de escalafón —que la Secretaría de Cultura sigue sin resolver—, y claro, más de uno se pregunta cómo está el clima en Tlaxcala. Por cierto: ¿será por el clima que los sindicalistas eligieron Boca del Río para discutir sus estatutos?
Una directora para el Franz Mayer
Hace dos semanas el Museo Franz Mayer anunció que Héctor Rivero Borrell dejaba la dirección de este recinto, del que fue titular por 25 años. Mucho se ha especulado acerca de quién ocupará la dirección de este museo, que por cierto está por abrir la muestra Virgen de Guadalupe. Arte y devoción”. Pues nos adelantan que no será un director sino una directora: se trata de Alejandra de la Paz. Lo curioso es que De la Paz, quien hace algunos años fue coordinadora nacional de Patrimonio Cultural y Turismo de Conaculta, tiene menos de seis meses de haber llegado como directora del Museo de Arte Contemporáneo Juan Soriano, en Morelos.
Lejos, la época dorada del Cervantino
La programación de la 46 edición del Festival Internacional Cervantino es, para algunos, tan pobre que ni vale la pena el viaje. Una fiesta tan grande como la que se desarrolla en la capital guanajuatense tiene días, digamos, flojos, pero se compensa con la presencia de grandes figuras como Arvo Pärt o la Sinfónica de Chicago, por mencionar algunas recientes. Sin embargo, desde hace un par de años este encuentro cultural ha sido cuestionado por alejarse más y más de su época dorada. Esta percepción arreció el año pasado y en esta edición, nos aseguran, está peor que nunca. Por ejemplo, en la primera semana sólo una función es realmente de alto nivel internacional. ¡Una! Llama también la atención que, pese a que según las autoridades hubo un aumento del presupuesto, hasta el programa general se imprimió en un formato más económico.
