Para los creadores mexicanos que están convencidos de que este no es el mejor sexenio para hacer grandes obras, les dejamos esto para que tengan un consuelo: tampoco es un buen sexenio para los creadores extranjeros. Si no nos creen, pregúntenle a los arquitectos Norman Foster y Renzo Piano. Sus edificios, que estaban contemplados para alojar al aeropuerto internacional de la Ciudad de México y al Pabellón Contemporáneo de Chapultepec, terminaron en nada. Uno apenas llegó a obra negra y el otro se malogró por la negra obra de quienes han hecho del gran proyecto Chapultepec una pachanga de 10 mil millones de pesos, a la que ya se le vino el tiempo encima. Han convocado a un concurso para el diseño y construcción de un pabellón que tiene que quedar listo para ya. Una chulada de decisión porque, nos cuentan los que saben de estos manejes, esa ha sido lo que faltaba para que el museo termine siendo chapuza total. Basta recordar cuántas obras que no se realizaron comenzaron en concursos y terminaron en maquetas. Si se hiciera un museo con maquetas de las obras mexicanas que nunca pudieron ser, tendríamos uno de los museos más grandes de Chapultepec.
El tiempo corre y nada sobre el concurso para el proyecto estrella
Hoy justo se cumple una semana de que fue publicada en la Gaceta Oficial de la Ciudad de México la convocatoria “Proyecto: Pabellón Naturaleza y Cultura, Bosque de Chapultepec Ciudad de México” y se mantiene la poca claridad sobre las bases que, por principio, no precisan que sea, como señalaron, un concurso nacional, con lo que sólo estarían invitados a participar profesionales y estudiantes, diseñadores, arquitectos, biólogos, ecólogos y artistas que “aporten una idea innovadora para construir un espacio encaminado a rehabilitar el Jardín Botánico”; dan los criterios generales del espacio y necesidades de la obra, pero se determinan, eso sí muy claro, calendario de registro, dudas y entrega, pero se sabe poco de las características particulares de la obra. Lo que sí dicen es que la o el ganador se integrará “a un conjunto de especialistas” y participará en el desarrollo del proyecto. Nos cuentan que aún están trabajando en los detalles y es cuestión de días para que definan las bases que hasta ahora no se conocen. El tiempo corre y los interesados deberán registrarse antes del 8 de abril.