Con motivo de los dos años de su elección, Andrés Manuel López Obrador emitió un mensaje el miércoles. Al inicio dijo: “Estamos llevando a cabo una auténtica transformación política, económica, social y cultural”; sin embargo, en los cerca de 45 minutos que duró el mensaje, los temas culturales sólo tuvieron lugar durante ¡20 segundos!, tiempo que aprovechó para hablar de uno de sus megaproyectos: “Se inició la creación del Complejo Artístico y Cultural Los Pinos, que incluye todo el Bosque de Chapultepec, así como el parque ecológico del Lago de Texcoco, con una inversión autorizada para ambas obras de mil 600 millones de pesos”. ¿De verdad era lo único para mencionar sobre el sector cultural? Quizá sí, sobre todo si se considera que debido a las medidas de austeridad —que también resaltó—, hoy instituciones como el INAH están en una situación crítica. Pero incluso hubo temas que no fueron mencionados en el Informe, como la ciencia. Tal parece que el papel de la cultura y la ciencia en la 4T no tienen lugar ni en los dichos ni en lo hechos.
Frentes, movimientos y colectivos se unen. ¿Responderá Presidencia?
Durante estos tres meses y medio, desde que México inició la sana distancia y a un mes de que ésta se levantara, colectivos que venían de años atrás y movimientos que se han constituido en fechas recientes han demandado que la Presidencia y la Secretaría de Cultura no dejen al sector en una situación tan precaria por los recortes y la austeridad, que den alternativas a los artistas a cambio de contratos, que haya apoyos a museos que carecen de recursos autogenerados y a los creadores de artes escénicas que han cerrado sus salas. Han sido diversas causas y con razones más que justificadas porque la cultura ha acabado como uno de los sectores más golpeados por la crisis y, de cara al futuro, la recuperación tomará mucho tiempo. Esas causas se habían expresado desde agrupaciones específicas o de forma individual, pero este 1 de julio, cuando se conmemoraron dos años de la elección de Andrés Manuel López Obrador, los movimientos decidieron sumarse en una carta donde exigen al Presidente respuestas claras, urgentes. Son nueve organizaciones las que se han unido en una causa común que llaman “El arte y la cultura son derechos humanos”. Y, como en semanas pasadas, aquí volvemos a dejar en este espacio la misma pregunta: ¿será que Presidencia los escucha esta vez?