Muletas y sillas de ruedas llenaron el escenario del Teatro de la Danza Guillermina Bravo durante la presentación del Ballet Mexicano de la Discapacidad (BMD) , en el marco del festival Internacional Danzatlán, organizado por la Fundación Elisa Carrillo Cabrera A.C.

El BMD estrenó del montaje Capacidad/dis, una muestra de la fuerza y habilidad que poseen sus bailarines para desenvolverse sobre el escenario, informó el INBA en un comunicado.

Los artistas realizaron con precisión cada coreografía: desde suaves movimientos en piezas como el "Danzón No. 2" de Arturo Márquez o el "Ave María", hasta culminar con el ritmo de "Guadalajara", donde el vestuario se complementó con sombreros de charro.

Otro regalo para el público fue la música, la violonchelista Maricarmen Graue y la pianista Itzel Santiago, invidentes, deleitaron con una ejecución majestuosa de todos los temas.

Además, el Coro de mujeres de manos amorosas, integrado por madres y abuelas de los artistas, interpretó en lengua de señas La Llorona, La Bikina y Guadalajara, arrancando los aplausos de los asistentes.

Al finalizar, David Serna, fundador del Ballet Mexicano de la Discapacidad , agradeció a la maestra Elisa Carrillo la oportunidad para dar voz a tantas personas que tienen mucho talento para el arte y grandes deseos de expresarse.

Los asistentes salieron conmovidos después de ver el esfuerzo y la calidad del ballet, el cual es una muestra de que no existen impedimentos para lograr lo que cada quien se proponga.

Creado en 2009 en la Ciudad de México, el Ballet Mexicano de la Discapacidad se ha presentado en las embajadas de India y Brasil en México, el Museo Universitario de Arte Contemporáneo de la UNAM, la Universidad Autónoma de Chapingo, la Universidad Autónoma de la Ciudad de México, el Centro Nacional de las Artes y, desde 2016, es invitado del festival internacional de discapacidad en Colombia, representando a México.

Es de las pocas compañías en el mundo donde todos sus integrantes son personas en condición de discapacidad, lo cual le ha convertido en uno de los principales promotores de la inclusión en el arte.

Además, todas las personas que conforman el ballet hablan lengua de señas mexicana y sistema de lectura Braille, incluso quienes no tienen discapacidad auditiva o visual. Esta motivación los ha impulsado a crecer con nuevos proyectos, como la academia de arte, la cual busca ofrecer educación artística con personas que comparten la misma condición.

Como un proyecto a futuro, pretenden conformar un consejo académico integrado por artistas, científicos e intelectuales, todos y todas con discapacidad.

akc

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