El director teatral ruso Kirill Serébrennikov , investigado en un caso de corrupción, recibió hoy el apoyo unánime del mundo de la cultura , incluido de figuras vinculadas estrechamente al Kremlin.
Una treintena de directores, actores y músicos se presentaron hoy como garantes de Serébrennikov, director artístico del Centro Gógol, que podría ser llevado a juicio esta semana.
La lista incluye a cineastas como Stanislav Govorujin, cantantes como Iosif Kobzon y escultores como Zurab Tsereteli, estrechos aliados del presidente ruso, Vladímir Putin, además de actores como Serguéi Bezrúkov y músicos como Boris Grebenschikov.
A principios de septiembre, expresó inquietud por el caso el ministro de Exteriores de Francia, Jean-Yves Le Drian, en cuyo país el director es muy admirado, y antes lo hicieron la oscarizada actriz Cate Blanchett o la Nobel de literatura, Elfriede Jelinek.
La Justicia rusa estudia hoy si prolonga otros tres meses el arresto domiciliario de Serébrennikov, investigado con otras tres personas en un caso de presunta malversación de fondos públicos.
Según el Comité de Instrucción, uno de los testigos acusó al director de estar al tanto de la existencia de una "caja b", que presuntamente permitía a los contables sacar dinero en efectivo de manera encubierta.
Serébrennikov estaría al tanto de los contratos ficticios firmados por Séptimo Estudio, compañía fundada por el director, con otras empresas, que servirían de tapadera para dichas maquinaciones.
Considerado uno de los directores de teatro más respetados de Rusia, Serébrennikov fue detenido e interrogado en mayo pasado y tanto su domicilio como su despacho en el Centro Gógol fueron registrados.
Quedó en libertad poco después de prestar declaración, pero en agosto fue puesto bajo arresto domiciliario, lo que causó un gran revuelo en círculos culturales rusos y extranjeros.
Varias personas vinculadas con Séptimo Estudio han sido detenidas por la desaparición de los fondos destinados entre 2011 y 2014 al proyecto "Plataforma" de popularización y desarrollo del arte moderno.
El director, que tachó de "tremenda injusticia" las acusaciones, pidió ayuda al público para probar la inocencia de los implicados en el escándalo.
Serebrennikov, de 48 años, ha participado en varias manifestaciones de protesta contra Putin y criticado la creciente influencia de la Iglesia Ortodoxa en Rusia, por ejemplo en su última película The Student (2016) que fue premiada en Cannes.
sc