El paro nacional de mujeres ha provocado debates. Hace unos días, el titular de la Dirección de Bibliotecas, Marx Arriaga, ofreció su postura en Hidalgo, en el programa “Fandangos por la lectura”: “Mujeres, si en verdad buscan emanciparse de sus opresores, modifiquen este sistema machista que las rodea, no esperen que su libertad llegue como un regalo. Por favor, lean aquellos libros, ahí están descritos los caminos para su revolución. Nuestro Presidente no las engaña. ¿Quieren cambiar este sistema machista? Necesitan dos cosas: uno, cultura, lo cual les dará identidad; y dos, educación para desarrollar un pensamiento crítico. ¿Quieren ambas? Asistan a la biblioteca pública”. Doctor: No dude que las mujeres buscan “modificar este sistema machista”. La libertad no es un regalo, es un derecho. Por cierto, ¿las más de 7 mil bibliotecas de la Red Nacional que usted coordina tienen condiciones dignas, son atendidas por profesionales con salarios justos? Asumir que hay un sistema machista porque las mujeres no van a la biblioteca es ignorar, incluso despreciar, la realidad de millones de mujeres. ¿Qué les dice a las que no tienen en sus comunidades, ya no una biblioteca, ¡una escuela!?
De las “iniciativas históricas” para Cultura...
El diputado Sergio Mayer presentó hace unos días ante el Pleno de la Cámara de Diputados una iniciativa con proyecto de decreto para reformar el Artículo 35 de la Ley General de Cultura y Derechos Culturales, con el objetivo, dijo, de fortalecer el trabajo legislativo en materia de cultura. El promovente de la iniciativa fue el panista Ricardo Flores, quien, al subir a la tribuna conminó a votar por una iniciativa “histórica”. Y sí, se aprobó con 430 a favor y dos en contra. ¿Y cuál fue ese gran esfuerzo histórico que ayudará a crear un gran “federalismo cultural?” Ah, pues que a la Reunión Nacional de Cultura que se hace cada año con la participación de la Secretaría de Cultura y los titulares de Cultura de las entidades federativas, así como grupos y promotores culturales, ya también podrán ir los integrantes de la Comisión de Cultura. A veces cualquier chinampina se puede anunciar como espectáculo de fuegos artificiales, pero no deja de ser chinampina.