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Mérida. —Alrededor de 118 millones de pesos mensuales están dejando de percibir las principales zonas arqueológicas de Yucatán, así como el Museo del Mundo Maya, instalaciones que desde el pasado 20 de marzo están cerradas al público por la contingencia sanitaria por el Covid-19.
“Son recursos importantes, pero hemos tenido que adaptarnos usando redes sociales y otras herramientas tecnológicas para desarrollar el programa ‘Cultura en línea’”, dijo Erica Millet Corona, secretaria de la Cultura y las Artes de Yucatán.
Aunque faltará ver al final de cuentas los daños y las pérdidas, por lo pronto ya se observan afectaciones económicas por la nula captación de visitantes tanto nacionales como extranjeros en las principales zonas mayas, grutas y cenotes del estado.
De acuerdo al Patronato Cultur del gobierno de Yucatán, se estima que se obtienen alrededor de mil 400 millones de pesos al año por las cuotas de acceso a las principales zonas arqueológicas mayas, como Chichén Itzá (la de mayor afluencia con aproximadamente 480 mil visitantes al año), Uxmal, Dzibichaltún, Xcambó, las grutas de Lol-tún y otros más.
Esos recursos los capta directamente la Agencia de Administración Fiscal del gobierno de Yucatán luego de sacar los porcentajes de cobro estatal y los que le corresponden al INAH, de acuerdo a la legislación federal.
Sin ingresos
El Museo del Mundo Maya, ubicado en el fraccionamiento Unidad Revolución y carretera Mérida- Progreso, ha dejado de captar alrededor de un millón 900 mil pesos por mes por concepto de visitas y recorridos al lugar, de acuerdo con la funcionaria estatal.
Ese museo, cuya construcción se está pagando desde 2009, le cuesta al gobierno de Yucatán poco más de 220 mil pesos al mes, mismos que se están cubriendo regularmente aunque el sitio no tiene ingresos debido a la pandemia.
De hecho no se permitió el acceso masivo de visitantes durante el equinoccio de primavera, el 21 de marzo. Pero dos días antes se observó ligeramente el fenómeno y, entonces, poco más de 4 mil personas sí pudieron ingresar.
Desde el 18 de marzo ni el Patronato Cultur del gobierno local ni el INAH del gobierno federal han podido captar dinero por el acceso a esos sitios mayas y no hay fecha para su reapertura.
Tampoco se han estimado las pérdidas y consecuencias por la baja captación del turismo en cenotes y playas de Yucatán.
Las alternativas
Pese al cierre de las zonas arqueológicas del estado se han generado opciones para los turistas. En el caso de Chichén Itzá, a través de la tecnología digital se pueden explorar las edificaciones que conforman ese complejo que fue uno de los centros más importantes de la civilización maya en la Península del Yucatán.
Se pueden observar y recorrer El Castillo principal, el Cenote Sagrado, el Templo de los Guerreros, el Osario, El Caracol y otros sitios.
Para mantener los espacios vigentes, la secretaria de la Cultura y las Artes informó que durante la contingencia han puesta en marcha el programa “Cultura en línea”, con el que el público puede interactuar con artistas locales y regionales.
Además en redes sociales como Facebook, Twitter y YouTube se puede observar la puesta en escena de diversas obras teatrales.
“No sabemos cuánto tiempo estaremos sin teatros abiertos, sin la posibilidad de ir a conciertos, por lo que estamos aprovechando las herramientas tecnológicas a nuestro alcance para mantener vigentes los espacios culturales”, explicó.
La Dirección de Cultura del Ayuntamiento de Mérida también organizó serenatas y espectáculos en línea para el público amante de la trova yucateca.
