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La obra teatral " Conquistadores " recrea en tono de humor hechos destacados de la conquista de América y escenificará, 500 años después, la toma de Tenochtitlán desde la cuna extremeña de Hernán Cortés , el militar que aliado con los tlaxcaltecas ocupó la capital del imperio azteca .
El teatro romano de Medellín (Badajoz, suroeste de España) será el escenario para representar la obra el 13 de agosto, el mismo día que aquel acontecimiento histórico.
Y es que se cumplen 500 años desde que el 13 de agosto de 1521 el extremeño Hernán Cortés , al frente de un ejército formado por españoles y tlaxcaltecas, ocupara la capital azteca de Tenochtitlán, que llevaba sitiada desde el mes de mayo, lo que impulsó el dominio hispánico en tierras mexicanas, según una nota de prensa.
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Esta obra -producida por Proyecto Cultura, dirigida por Pedro Luis López Bellot e interpretada por Chema Pizarro, Nuqui Fernández y Francis J. Quirós- "desmitifica" la conquista de América a través del teatro del absurdo.
El punto de partida de este espectáculo son tres conquistadores extremeños anónimos que forman parte de una tripulación embarcada hacia América.
La obra alterna las peripecias de estos extremeños con la recreación humorística de acontecimientos históricos vividos por personajes como los Reyes Católicos, Colón, Vasco Núñez de Balboa, Malinche, Hernán Cortés, Inés Suárez, Francisco Pizarro o Pedro de Valdivia, entre otros.
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Esta visión de la conquista de América que se ríe de los mitos y las miserias de aquella época parte de un texto de J.P. Cañamero, al que dan vida tres actores envueltos en un espacio sonoro creado por Álvaro Rodríguez Barroso.
"Queríamos humanizar la conquista. No la planteamos como algo heroico ni la denostamos", señala el director de "Conquistadores", según el cual quienes participaron en ella desde España "hicieron cosas extraordinarias y atroces" y quienes "la recibieron hicieron también cosas extraordinarias y atroces".
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En la obra, explica, "hablamos del ser humano y su relación con el contexto y la conquista". Y sus creadores lo hacen desde lo cotidiano, con un lenguaje próximo, cargado de bromas y sobreentendidos.
El director de "Conquistadores" ha concebido una puesta en escena minimalista, con escasos elementos materiales (una bañera victoriana, unas varas) y un espacio casi vacío, sin escenografía.
El vestuario es contemporáneo, pero con reminiscencias de los siglos XV y XVI.
fjb
