Un total de 18 artistas de ocho nacionalidades diferentes participan este año en el Simposio Internacional de Escultura que se celebra en Santiago, donde elaboran sus obras al aire libre en uno de los parques de la capital, bajo la atenta mirada de los transeúntes.

En su quinta edición, el evento escultórico organizado por la cadena de cementerios Grupo Nuestros Parques, busca "devolver el arte a estos lugares sagrados", según explicó a Efe el gerente comercial de la empresa, Erich Sandrock.

"Las esculturas parten básicamente de los cementerios,

ya que los seres humanos decoraban esos lugares que, a diferencia de los animales, sí reconocían los sitios donde estaban sepultados sus seres queridos. De ese descubrimiento nació esta loca idea de volver a unir ambos conceptos de nuevo", indicó Sandrock.

Para ello, continuó, tuvieron que hacer una selección de nueve artistas, entre las más de 200 solicitudes que recibieron, "procedentes de los cinco continentes".

Los seleccionados este año son: Jo Kley (Alemania), Georgi Minchev, Zdravko Zdravkov y Liliya Pobornikova (Bulgaria), Milton Estrella (Ecuador), Miguel Merino y Soledad Ramsay (Chile), Hedayat Sahrei (Irán), Simona de Lorenzo y Alessio Ranaldi (Italia).

A los que se sumarán los invitados de honor de esta edición, maestros consagrados como los chilenos Federico Assier, Francisco Gazitúa, José Vicente Gajardo, Mauricio Guajardo y Pilar Ovalle, los mexicanos Dolores Ortiz y Carlos Monge, o la británica Isabel Landtry.

Todos ellos trabajan en una obra propia que interpreta el mismo concepto: la diversidad.

A través del cual convertirán grandes masas de materiales como el mármol traventino, el hormigón, el acero o la madera, en obras de arte que poblarán los cementerios de Chile.

La escultora chilena Soledad Ramsay, la más joven de la muestra, explicó que este tipo de encuentros sirven para "aprender cómo trabajan los otros escultores", sobre todo su "manera de solucionar, de interpretar el volumen, de relacionarse con los materiales".

Al tiempo que añadió que la "escultura pública" tiene un "impacto fundamental para las personas" en el modo en que se "relacionan con el espacio", algo que también sirve, concluyó, para "acercar la cultura a las personas", algo que es aún más "espiritual" en esta ocasión "al tratarse de un cementerio".

akc

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