Leonardo López Luján, Antonio Rubial, Carlos Illades, Mercedes de la Garza y Rodrigo Martínez Baracs son algunos de los especialistas que conforman el programa de la Cátedra de Patrimonio Histórico-Cultural “Rafael Tovar y de Teresa”, que organiza anualmente la Academia Mexicana de la Historia, ubicada en Plaza Carlos Pacheco 21, en el Centro Histórico de la ciudad.
E n este cuarto ciclo, explicó Javier Garciadiego, director de la Academia, serán 10 sesiones, el segundo lunes de cada mes, que impartirá un académico de número.
“Esta cátedra es para rescatar el patrimonio histórico, artístico y cultural de México. Hay ocasiones en las que tenemos ciclos en donde participan historiadores que no son miembros de la Academia; sin embargo, en esta ocasión, todos son integrantes de la institución”, dijo el historiador.
Los temas, agregó, serán variados porque se trata de “un ciclo muy libre”.
La primera conferencia será “La banda del automóvil gris y la filmación de la película sobre dicha banda”, que dictará Aurelio de los Reyes, el 10 de febrero. Después, el 9 de marzo, Antonio Rubial ofrecerá “Las piedras parlantes. Portadas barrocas de Nueva España”.
El tercer encuentro será “Cronistas, misioneros y viajeros extranjeros: sus miradas sobre el clima en la historia de México”, de Virginia García Acosta, el 10 de abril.
“García Acosta hablará sobre el clima en la Ciudad de México, para ver si ha cambiado. El siguiente mes, el 11 de mayo, López Luján hablará sobre la arquitectura en Templo Mayor, y Carlos Illades hablará de los artesanos en el siglo XIX, en la capital de país, el 8 de junio”.
Garciadiego señaló que cada investigador eligió el tema de sus exposiciones, “porque son temas en los que son expertos”. Añadió que la cátedra “Rafael Tovar y de Teresa” nació en 2017 y era patrocinada por la Secretaría de Cultura, pero ahora la financia la Secretaría de Educación Publica (SEP).
Durante sus primeros 40 años, explicó el historiador, la Academia Mexicana de la Historia fue subvencionada por sus propios miembros. A partir de los años 50, Arturo Arnaiz y Freg convenció a Jaime Torres Bodet, secretario de Educación, para que apoyará a la Academia. “Desde los 50, la Academia recibió un subsidio de 20 mil pesos anuales de la SEP. Para 2014, la SEP dejó de dar ese dinero y fue subvencionada por el entonces Conaculta, pero con el nuevo gobierno regresamos a la SEP”. indicó.