cultura@eluniversal.com.mx
Luego del terremoto del 19 de septiembre, en la obra mural de Diego Rivera en la Universidad Autónoma de Chapingo, se pudo observar la reactivación de grietas preexistentes, la aparición de nuevas y desprendimientos en las piezas.
Las principales afectaciones ocurrieron en la Capilla Riveriana, cuyos murales fueron realizados por Rivera entre 1923 y 1927. Los deterioros mayores se presentan en el muro del ábside, donde se activó y prolongó una grieta preexistente. También se presentan nuevas fisuras en uno de los arcos y en otras secciones.
En la unión de muros del Museo de Agricultura y en el edificio del Consejo Técnico se activaron fisuras preexistentes y se generaron nuevas en las obras de Rivera, Xavier Guerrero, Luis Nishizawa y Alfredo Nieto. El Centro Nacional de Conservación y Registro del Patrimonio Artístico Mueble y dicha Universidad realizarán un dictamen para plantear un proyecto de intervención.
En un comunicado, el INBA explicó que personal de ese Centro ha verificado unas 567 obras murales en 36 ubicaciones de la Ciudad de México, el estado de México, Morelos y Tlaxcala. En Morelos, el sismo afectó severamente al Palacio de Cortés y los ocho murales y nueve grisallas realizados por Rivera entre 1929 y 1930. El Cencropam hará una revisión y propondrá el proyecto de restauración, lo mismo en el Palacio de Gobierno de Tlaxcala, donde detectó fisuras en los murales de Desiderio Hernández Xochitiotzin.