En los últimos 15 años México ha vivido un auge del diseño, una explosión de creatividad en los distintos diseños, con gran profesionalización, alto nivel de educación, eventos que congregan a creadores nacionales e internacionales, como bazares, ferias, simposios, es el caso de Design Week y el Abierto de Diseño. “La comunidad del diseño es enorme, muy activa”, así la describe la curadora e investigadora Ana Elena Mallet .
¿Quiénes son esos creadores?, ¿en qué disciplinas están?, ¿cómo es la cotidianidad de sus trabajos?, ¿dónde están?, ¿qué relación tienen con la ciudad?, ¿qué proponen?
Estas son algunas de las preguntas que Ana Elena Mallet, intenta responder en el programa “ La guía del diseño en México ”, que se transmite por Canal 22 .
“La guía del diseño en México” es un programa de 25 minutos, que se puede ver todos los lunes a las 9:30 pm., con repetición el martes a las 12:30 por el mismo canal, que además tiene transmisión vía streaming los lunes, y que desde los martes en la noche se puede ver en Youtube. Fueron realizados seis programas, cada uno con dos ejemplos de trabajo de distintos tipos de diseño; además, uno de los programas presenta el trabajo de dos galerías.
En cada programa, Ana Elena Mallet llega al estudio de los diseñadores, habla del barrio donde estos se encuentran, y luego conversa con ellos en sus espacios, muestra cómo trabaja el equipo, describe las características de cada proyecto y sus fortalezas.
La investigadora cuenta en entrevista que Alejandro Andrade , productor y realizador de cine, la buscó hace un año, con la idea a presentar a la administración de Canal 22, que dirige Armando Casas , otros proyectos.
A partir de que Mallet en sus redes sociales como Instagram, ha subido las visitas a estudios de diseñadores, que como parte de sus investigaciones, el formato ha obtenido muchas respuestas del público, y lo que ahora plantearon fue llevarlo a la televisión, un medio que llega a otros públicos.
“Me pareció que era una buena tratar de entrar en la intimidad o la privacidad laboral de estos diseñadores. Nos dieron en esta primera etapa una media temporada, seis programas. Los hemos divido por disciplinas relacionadas con el diseño: gráfico, industrial, textil, de modas, de joyería, y galerías de diseño”.
Uno de los énfasis que el programa resalta es la interdisciplina en el diseño, que los diseñadores están trabajando como artistas, como editores, productores, arquitectos. “Hay una variedad de prácticas, de oficios que están haciendo los diseñadores, que se están aventando a hacer o aprender. Me interesaba en este primer acercamiento que el diseño es una disciplina compleja, diversa, multidisciplinaria”.
Otra innovación está en el hecho de llevar el tema del diseño a un canal de televisión público; en este punto, Mallet reconoce que a menudo el diseño es conocido por cierto nicho y que ahí se queda.
“He sido incisiva en llevar el trabajo del diseñador al museo, a los libros, pero hay una parte de difusión del trabajo del diseñador más amplia, que no se ha dado todavía, nos seguimos quedando en círculos especializados, bazares, exposiciones de museo, muy de nicho –dice Mallet–.
La también curadora reconoce que muchas veces la gente no sabe para qué sirve el diseño y las múltiples posibilidades que tiene: “Poder tener esta posibilidad de difundir a una mayor escala me parece muy importante. Uno casi siempre piensa que las salidas son exposiciones, editoriales, si acaso una conferencia, pero la televisión resultar ser un nuevo medio para comunicar el trabajo de los diseñadores; a ver cómo se recibe...”
Los programas, que realiza la productora Pisito 13, de Alejandro Andrade, se han grabado en estudios en las colonias Roma, Condesa, Obrera, Anahuac, Polanco. El primero fue de diseño gráfico, con Alejandro Magallanes y las Flaminguettes ; el segundo, fue diseño de moda, Guillermo Vargas 1/8 Takamura y Pink Magnolia ; el tercero fue de diseño industrial con Héctor Esrawe y Fabienne Capello ; el cuarto –que se podrá ver el lunes 23 de marzo-- es de galerías de diseño, Ago Projects y Ángulo Cero; el lunes 30 será de diseño de joyería con los casos de Varón y Estudio Rodete, y finalmente el lunes 6 de abril será de diseño textil con Déjate querer y Estudio Marisol Centeno Biyuu.
“Para mí es una nueva etapa, lo dudé porque hubo otras experiencias, tal vez era temas ajenos a mí. Esto es mi cotidianidad, conozco a los diseñadores, las dinámicas que se dan en los estudios, los procesos de trabajo. Conforme empezamos a visitarlos me di cuenta de que no tenía que hacer nada de actuación, que no fuera mío, sino hacer lo que hago cotidianamente, y creo que eso se refleja. El programa ha sido fresco revela cómo trabajan los despachos, como son sus oficinas y espacios creativos”.
Ana Elena Mallet celebra lo que ha pasado con el diseño en el país pero también señala pendientes:
“Hay una educación muy sólida en el diseño, no solo la Facultad de Artes y Diseño, el CIDI de Arquitectura de la UNAM, lo que hace la UAM, o las escuelas privadas como la del TEC y la Ibero, que fue la primera, o Centro… Además, los espacios de exhibición han llevado al público a tener otra valoración del diseño; hay nuevas formas de vender, bazares, ferias, eventos como el Abierto de Diseño, Design Week, que generan un imaginario distinto para lo que se creía que era el diseño”.
Sin embargo, Mallet dice que lo que hace falta ahora es mayor reflexión.
“Pensar qué es lo que nos hace falta, por qué el diseño en México, a quién está dirigido, qué deben hacer los diseñadores... Ya estamos llegando a un público en general y hay que hacer mucha reflexión para que el diseño sea una práctica cotidiana, que sea cotidiano contratar a un diseñador, que se sepa que se necesita para hacer desde una tarjeta hasta políticas públicas”.
La investigadora también reconoce que hace falta una mayor relación entre los diseñadores y la sociedad. “Estas generaciones crecieron mucho con la idea de hacer mobiliario, de estar por ejemplo en las ferias de Milán, y la parte pública, de vamos a diseñar juegos para parques o a trabajar con instancias públicas para diseñar señalética para el metro, un transporte público, carreteras, nos falta. Y también hace falta que las instituciones busquen tener un diseñador”.
Uno de los cambios que ha habido para el diseño en los últimos años es el de la exhibición de las obras en museos, de la realización de eventos, y de la publicación de libros, pero está pendiente que los museos formen colecciones de diseño.
“Varios museos extranjeros han comprado diseño mexicano: el Museo de Denver, el Lacma , el MoMA ; en México no hemos llegado a ello. Nuestra política de adquisiciones es raquítica. Los eventos, Mextrópoli por ejemplo, han propiciado que se integren a los museos; de cinco años a hoy hay exposiciones en museos de la Ciudad de México. Lo que falta generar congresos académicos sobre el diseño y la propia historia del diseño en México, y publicaciones”.
Mallet finalmente dice que si se da una segunda temporada del programa “La guía del diseño en México”, sería muy importante llegar a otros espacios del país, más allá de lo que se hace en la Ciudad de México.
fjb