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Las salas del Museo de Arte Moderno lucen llenas como pocas veces en los últimos años. Es la obra de Leonora Carrington la que conseguido que más de 80 mil personas, en las últimas cuatro semanas, desfilen por los espacios del primer piso donde se presenta la gran exposición homenaje a la artista que en 2017 cumplió 100 años de nacida.

Leonora Carrington. Cuentos mágicos ha convocado a públicos de diversas edades y orígenes. Han tenido oportunidad de seguir este recorrido por sus obras tempranas y las de los últimos años, sus pinturas y esculturas (unas cuantas), sus cartas, dibujos, muñecos, notas y las fotografías que relevan su cotidianidad y el mundo que le rodeaba. Se trata de una muestra que revisa más de 60 años de creación artística en las artes plásticas, en la literatura, en el cine, en el teatro. Figuran trabajos que datan de los años 30 (antes que la artista de origen británico llegara a México), hasta de pocos años antes de su muerte, en mayo de 2011.

La exposición descubre para los espectadores la voz de la artista: “Muero lenta y penosamente de ganas de verte, regresa pronto”, le escribió en una carta aquí expuesta a Renato Leduc. Se puede conocer la evolución de los personajes de sus cuadros, los muñecos en tela que creaba. Son 223 piezas.

Curada por Stefan van Raay y Tere Arcq, se adentra en el espíritu creativo de la artista, y el origen de muchos intereses de su obra. Incluye obras inéditas de colecciones públicas y privadas de México y otros países; del Museo Nacional de Antropología, de la Colección Pérez Simón, del Museo Metropolitano de Nueva York, de la colección Pierre y Maria-Gaetana Matisse, entre otras.

Los curadores buscaron destacar la diversidad de campos del arte que trabajó Carrington: pintura, escultura, cine, teatro y literatura. Hay además máscaras y diseños escenográficos, tapetes, fotografías, documentos, libros y objetos personales que fueron parte de su imaginario desde la infancia.

Al presentar la exposición, el hijo de la artista, Gabriel Weisz Carrington (Presidente de la Fundación Leonora Carrington A.C.), expresó: “Ella construyó su propio universo. Eso se dice fácilmente, pero quien puede construir su imaginario sobre pinturas y escritura, es un fenómeno único. Ello sacó su imaginario, tan explosivo y lleno de humor negro a la vez, porque Leonora nunca se tomó en serio, más que en los momentos en que había que hacerlo”.

Algunas de las obras más importantes que figuran son The Giantess (1946), Are You Really Syrius? (1953) y The Inn of the Dawn Horse (Self-Portrait) (ca. 1937-1938). Se presentan además diversas obras inéditas como el tapete de lana Leo (For Hugh Fremantle) (1975), seis máscaras para una obra de teatro que ella escribió, Opus Siniestrus (1976) y el collage Papillon nocturne (1949).

La exposición abre facetas poco conocidas, como las incursiones de Leonora Carrinton en el cine (al respecto se presenta un ciclo en la Cineteca Nacional). Entre las piezas inéditas se encuentra un biombo de figuras míticas, un tarot, carteles para grupos feministas de Nueva York, una pintura de protesta que realizó tras los hechos del 2 de octubre de 1968 y las cartas a Renato Leduc. En un video, amigos hablan de ella: Pedro Friedeberg, Alan Glass, Mariana Pérez Amor y Alejandra Iturbe.

Leonora Carrington. Cuentos mágicos se acompaña de un libro editado en español e inglés por el MPBA, con el apoyo de la Fundación Mary Street Jenkins, y comprende 18 ensayos de autores nacionales e internacionales. La exposición es realizada por el Museo de Arte Moderno, en coproducción con el Museo de Arte Contemporáneo de Monterrey, y con apoyo de la Fundación Leonora Carrington A.C.

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