Hace 40 años, en junio de 1981, el Centro para el Control y Prevención de Enfermedades de Estados Unidos presentó la primera evidencia clínica de la enfermedad que un año después comenzaríamos a llamar sida, Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida. Hoy, cuando una pandemia ha obligado al confinamiento y ha traído de vuelta fenómenos como el miedo al otro, la asepsia y la distancia entre los cuerpos, la necesidad de la memoria en torno a lo que como sociedad vivimos ante el sida y el VIH es urgente.
El MUAC, Museo Universitario de Arte Contemporáneo, de la UNAM, expone Expediente seropositivo. Derivas visuales sobre el VIH en México, una muestra que ha traído el tema al museo, desde el arte, desde los archivos, desde el diálogo.
Curada por Sol Henaro y Luis Matus, la exposición documenta las producciones visuales que el VIH-sida suscitó en México desde 1983, año en que se documentaron los primeros casos en el país y esto estrujó a la sociedad: “Sí, hay algo que trastocó a nivel social y de manera radical, igual que ahora lo vivimos por el Covid”, dice Sol Henaro.
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La exposición digital facilita precisamente la lectura de estos materiales documentales, que fueron la respuesta de una comunidad ante la propia enfermedad, pero también al rechazo, discriminación e ignorancia, una situación que implicó luchas y conquistas en cuya defensa no se puede ceder.
“Nos sumamos a un esfuerzo internacional por tratar de generar una narrativa ampliada de lectura del VIH desde la práctica artística”, describe la curadora. “En México, los primeros casos documentados son del 83 y, en términos de eclosión visual, es en el tránsito de los 80 a los 90. No fue tan inmediato; lo inmediato fue la movilización desde el ámbito civil”.
En el micrositio aparece un video de Rolando de la Rosa donde habla de varias obras suyas. Describe que el códice de 15 páginas cuenta la historia de migrantes que iban a Estados Unidos por hambre, que se contagiaban de sida, regresaban a morir y contagiaban el sida a sus familias: “Eso nos va a servir para dejar de pensar en el arte como mercancía; para pensar que tiene una función que es social, que somos los curadores de la sociedad, los que tenemos capacidad de ver más allá y plasmar las soluciones en obras”.
La exposición y micrositio muestran cómo entonces hubo muchas caricaturas en periódicos, y ahora fue importante recuperarlas: “Articularon un mensaje poderoso a través del humor, descolocaron el estigma sobre ciertas comunidades, y tenían críticas al Estado, a la iglesia, a Provida”.
La propuesta de la muestra es “defender cierto activismo desde el archivo, ejercer una responsabilidad ética, política e histórica con el presente y el pasado, porque el MUAC puede incidir entre las comunidades que en su mayoría son jóvenes. El VIH no ha desaparecido, al contrario, y es importante convocar el tema desde la esfera pública”.
Como en la versión original, la exposición en el micrositio tiene cuatro núcleos dentro de los cuales se despliegan obras, acciones y documentos: Flujos inciertos (y ciertos fluidos); Medios (y miedos); De controles (y otros cocteles), y Del estigma a la resistencia. Luego se puede ingresar en el mismo sitio a links específicos con Textos y Publicaciones; Programa público; Ciclo de cine —que está por anunciarse—; y Efectos o publicaciones en torno de la propia muesta.
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Cómo se vive hoy
Al investigar, un tema central para los curadores fue cómo se vive la enfermedad. Surgieron preguntas como: ¿qué pasa generacionalmente?, ¿por qué ya no se habla del VIH? “Yo crecí con campañas en el Metro, en la tele, iba a los conciertos, a las veladas de muertos. ¿Por qué los chavos no tienen temor? Bueno, hay antirretrovirales, no es un fenómeno de muerte, claro, pero no saben que la gente luchó muchísimo desde el ámbito civil para presionar al gobierno para que se abriera una clínica especializada como la de la Condesa; creen que siempre van a estar los medicamentos asegurados, y no: si eso no lo peleamos, nos lo van a arrebatar en cualquier momento. Esto viene de luchas sociales civiles. En ese sentido, el museo tiene que ser una caja de resonancia de todos estos debates desde las visualidades”.
La curadora compara esto con el momento actual; en un video para el Instituto de Investigaciones Estéticas, que está en el micrositio, plantea: “En el contexto de la nueva pandemia aparecen resonancias del VIH que nos convocan a reflexionar sobre las discriminaciones actuales, la paranoia séptica, la urgencia por entender cómo han saltado virus animales de una especie a otra, el temor al contacto, los beneficios y consecuencias de los medicamentos y vacunas por venir, las teorías conspiratorias sobre guerras biológicas o la pregunta por cómo recuperar el contacto físico entre las personas. Como sucediera con la crisis del sida, resulta urgente pensar nuevas acciones solidarias, de acompañamiento y movilizaciones que procuren avances en materia de derechos para esta u otras emergencias por venir”.
El micrositio, que tendrá versión en inglés, por ahora está abierto de manera indefinida (https://muac.unam.mx/vih-expediente-seropositivo/)
En el Museo del Chopo
* La experiencia sexogenérica desde la no ficción, conferencia en línea de Gabriela Wiener en el marco del mes del orgullo LGBTTTI.
* La escritora peruana abordará temas relacionados con su escritura, caracterizada por cuestionar los lineamientos de la heteromonogamia.
* Gabriela Wiener es autora de libros como Sexografías, Nueve Lunas, Llamada perdida, Dicen de mí y el libro de poemas Ejercicios para el endurecimiento del espíritu.
* La charla será el 5 de junio a las 12 horas, en Facebook Live y YouTube del Chopo.