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El arte no siempre es políticamente correcto, en especial aquellas obras que fueron creadas en tiempos pasados, cuando eran distintas las reglas morales y sobre todo, las sociedades. Hace un mes se generó una polémica en el Met de Nueva York por la obra de una adolescente en una posición sugerente, la cual había sido pintada durante el siglo XX.
Ahora, una controversia similar se ha generado ante la modificación del argumento de la ópera Carmen , que fue estrenada originalmente a mediados del siglo XIX.
Carmen
es una ópera reconocida mundialmente, creada por el francés Georges Bizet y trata sobre una bella gitana de fuerte temperamento que es libre con su amor y seduce al inexperto soldado Don José, quien deja todo por ella y luego es rechazado cuando Carmen vuelca su amor hacia un torero.
Los celos impulsan a Don José a asesinar a su amada. Desde su estreno, hace 179 años, la muerte de la protagonista alborotó a los espectadores. Actualmente, se monta una versión modificada en donde la heroína logra burlar su trágico destino.
Se trata de un montaje dirigido por el italiano Leo Muscato, que se está presentando desde el 7 de enero en la Ópera de Florencia y que ha causado gran revuelo.
"Cuando preparábamos esta puesta en escena, el director del teatro de Florencia me preguntó si no era posible, por una vez, que Carmen no muriera a manos de Don José. Y cuando comenzamos los ensayos, tuve la idea muy potente de que este espectáculo sí podía tener una Carmen que por una vez en la historia, tomara el riesgo de defenderse y de sobrevivir a la violencia y crueldad de Don José", dijo Muscato a la Radio Francia Internacional (RFI).
En la nueva versión de Carmen , muere el maltratador y no la víctima. En el último acto, la protagonista arrebata la pistola a Don José y le pega un tiro.
La modificación ha generado división en las reacciones. Hay quienes consideran positivo el nuevo giro, como es el caso del Alcalde de Florencia y director del teatro en cuestión, Dario Nardella: "Aprecio su elección porque lo hizo con un objetivo preciso: reflejar un tema gravísimo y serio en Italia como es la violencia contra las mujeres . [...] El teatro debe ser denuncia, la cultura debe ser reinterpretada en el tiempo presente. Y vale también para la gran cultura del pasado. Eso no significa cambiar el pasado, no soy un estúpido que piensa en rescribir el arte".
Del otro lado están quienes consideran un sacrilegio profanar el clásico de Bizet. Está por ejemplo, el doctor en historia Gerard-Michel Thermeau, quien publicó on line la reseña "Carmen censurada en Florencia", donde dispara agudas críticas contra este montaje:
"Musicalmente las cosas están claras, Don José es una persona débil y celosa. Carmen es un personaje tan fuerte que ni siquiera necesita estos grandes solos que generalmente se usan en el escenario operístico. Matar a José por Carmen es simplemente no entender nada en el trabajo. ¿En qué se convierte Carmen? Ella toma el papel de Don José: un pobre hombre que no tiene otro argumento que matar".
Controvertida o no, la nueva Carmen ha resultado un éxito de taquilla. Las 6 funciones, de mil 600 localidades cada una, están agotadas y según informa el diario El País , el director del teatro ya piensa en una nueva temporada.
sc
