El Pabellón Nacional de la Biodiversidad —un magnífico recinto de 12 mil metros cuadrados de construcción que la Fundación Carlos Slim donó a la UNAM— fue inaugurado el 6 de octubre de 2021 en el Centro Cultural Universitario de CU, pero había permanecido cerrado al público a consecuencia de la pandemia de Covid-19. Esta situación, por fortuna, cambió a partir de hoy, viernes 17 de junio, cuando sus puertas se abren para recibir a los primeros grupos de visitantes.
“Los viernes, sábados y domingos habrá cuatro horarios de visitas guiadas: 10, 12, 14 y 16 horas. En cada horario podrán ingresar cuatro grupos de 25 personas cada uno. La entrada será completamente gratuita”, informa Susana Magallón Puebla, directora del Instituto de Biología de la UNAM, entidad universitaria que está a cargo de dicho inmueble.
Todas aquellas personas que deseen visitar el Pabellón Nacional de la Biodiversidad deberán registrarse previamente en la página https://forms.gle/d5Rd4fd4syTfsiHd9 y, en el caso de las escuelas interesadas, escribir al correo electrónico pabio@ib.unam.mx para solicitar su reservación.
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“Este esquema de visitas es preliminar. Conforme pase el tiempo, abriremos más días a la semana a un cada vez mayor número de grupos. Asimismo, quiero subrayar que el Pabellón Nacional de la Biodiversidad está bajo el Protocolo Museo Seguro, lo cual significa que cada visitante deberá venir con cubreboca. Por lo demás, este sitio dispone de nebulizadores ambientales y despachadores de alcohol en gel para desinfectarse las manos, así como de rampas por donde pueden circular sillas de ruedas y elevadores para que las personas con alguna discapacidad accedan a sus tres niveles”, señala Magallón Puebla.
Museo
El Pabellón Nacional de la Biodiversidad conjunta un museo interactivo y diferentes áreas de investigación del Instituto de Biología de la UNAM.
En el museo hay seis salas de exposiciones permanentes en las que se abordan distintos temas relacionados con la biodiversidad (como el impacto de las sociedades humanas sobre ella y los puntos de no retorno en los daños al medio ambiente), y una sala de exposiciones temporales (en esta última se montó una exposición dedicada a la dendrocronología, una disciplina científica que estudia los cambios ambientales registrados en los anillos de crecimiento de los troncos de los árboles).
“Para documentar la biodiversidad se indica, por ejemplo, cuántas especies de plantas, animales y hongos existen en el territorio mexicano, y cuáles son los diversos tipos de bioma o paisajes bioclimáticos”, refiere Magallón Puebla.
También se exhiben ejemplares de todas las colecciones biológicas, (algas, hongos, líquenes, briofitas, plantas vasculares, plantas acuáticas, frutos y semillas, insectos, ácaros, moluscos, crustáceos, helmintos…), así como instrumentos que han sido utilizados por los biólogos a lo largo de la historia (microscopios, aparatos para medir la temperatura, grabadoras…) y algunos equipos que se utilizan en la actualidad.
Áreas de investigación
En las áreas de investigación están resguardadas las cuatro colecciones nacionales de Vertebrados (es decir, la de Peces, la de Anfibios y Reptiles, la de Aves y la de Mamíferos) y la Colección de Maderas.
“Los visitantes podrán conocer estas colecciones y observar cómo los estudiantes e investigadores universitarios trabajan directamente con ellas”, comenta Susana Magallón Puebla.
Además, hay dos laboratorios: uno de Secuenciación Genómica y otro de Biología Molecular, que forma parte del Laboratorio Nacional de Biodiversidad, donde los investigadores obtienen el ácido desoxirribonucleico (ADN) de organismos y lo comparan con el de otros para entender sus relaciones y los procesos evolutivos que dieron origen a la biodiversidad y la mantienen.
Por último, en el nivel inferior, los visitantes tendrán la oportunidad de admirar, provenientes del Museo Soumaya, varias obras de arte (esculturas, pinturas, dibujos…) asociadas de alguna u otra manera al mundo animal, y, también, enmarcada en un muro, la medalla del Premio Nobel de Química que en 1995 recibió el científico puma Mario Molina.
“Nos da mucho gusto compartir las investigaciones que llevamos a cabo. Nuestro objetivo es que la gente de todas las edades —pero en especial la gente joven— se entusiasme con la biología y tenga una visión clara del trabajo que realizan los científicos dedicados a esta ciencia”, finaliza Magallón Puebla.
Susana Magallón Puebla
Directora del Instituto de Biología de la UNAM, entidad universitaria que está a cargo del Pabellón
“Este esquema de visitas es preliminar. Conforme pase el tiempo, abriremos más días a la semana a un cada vez mayor número de grupos”
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