Más Información
Videojuegos, el nuevo gancho del crimen para captar menores; los atraen con promesas de dinero y poder
“Vamos a dar apoyo a los pequeños agricultores por sequía en Sonora”; Claudia Sheinbaum instruye a Berdegué
Derrota de México en disputa por maíz transgénico contra EU; estos son los argumentos de Sheinbaum y AMLO para prohibirlo
La caída de las Torres Gemelas en 2001 trajo consigo un efecto colateral inesperado, que se guarda en una fábrica de Mairena del Alcor (España), donde se conserva la única reproducción de El Quijote en cómics grabados en azulejos y destinados inicialmente a ser colocados en la Gran Manzana, en Nueva York , hace veinte años.
Este original encargo que los atentados del 11-S truncaron, fue realizado desde Nueva York para decorar una plaza a una milla y media de las torres. Desde entonces, se guarda terminado completamente en la fábrica de cerámica artística Antonio González, en un local anexo a la casa de este artesano en ese municipio del sur de España.
Antonio muestra ese raro tesoro que guarda desde que los atentados tumbaron el proyecto: “me lo encargaron, estaba terminado, se produjo el atentado y nunca más se supo del tema”.
Lee también:
Mientras, enseña los 180 azulejos que reproducen escenas de la inmortal obra de Miguel de Cervantes , con un formato de cómic que fue saliendo de sus pacientes manos uno a uno con la llegada del nuevo milenio.
El origen del encargo hay que buscarlo en el número 29 de Washington Square en Nueva York, donde se encuentra la Glorieta del Quijote , un espacio abierto en 1926 y decorado con unos azulejos que regaló la empresa española Cerámica Montalván.
A finales de la década de 1990 se decidió afrontar la restauración del conjunto, que entre otras cosas contaba con sus azulejos en mal estado, un trabajo que se encargó al estudio de arquitectura neoyorquino Cutsogeorge Toman & Allen Architects-.
Y se contactó con Antonio González para encargarle un original proyecto: realizar la obra de Cervantes en cómic y en azulejos, para ser colocada en orden en la glorieta, con un total de 180 dibujos distintos.
Antonio, que llevaba trabajando en su propia empresa desde 1984, se puso manos a la obra y terminó el trabajo en los plazos previstos, hasta que el 11 de septiembre de 2001 el mundo se paralizó viendo caer los edificios del World Trade Center.
Igual que se paralizaba el envío de los azulejos a Nueva York, de la misma forma nadie pareció nunca acordarse del proyecto de reforma de la glorieta.
Lee también:
Los azulejos con El Quijote dibujado se encuentran almacenados en una de las estanterías de la fábrica de Antonio y su familia.
Afirma que están a la venta, “ya sea la colección entera o azulejos sueltos”, e incluso es capaz de reproducir uno en concreto si es necesario, de modo que si alguien se quiere llevar uno solamente, puede sustituirlo rápidamente.
Eso es posible por su enorme experiencia, pues empezó como aprendiz en 1966 y entre sus clientes se encuentran la Casa Real española, para la que ha realizado tres de los baños del Palacio de la Zarzuela en Madrid.
melc